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En un comunicado emitido ayer, la patronal de Bridgestone anunció el cierre temporal de sus operaciones en Argentina. En el mismo sentido ha anunciado Pirelli el cierre de su planta. Fate, por su parte envío al Sutna una carta documento exigiéndole el cese de las medidas de fuerza. El lockout patronal a tres bandas condiciona la audiencia del día lunes, en la que según el Ministerio de Trabajo las empresas se iban a sentar a negociar.
El acampe que el Sutna llevaba adelante frente al Ministerio se había levantado el viernes pasado, luego del compromiso del Ministerio de Trabajo y de las empresas fabricantes de realizar una audiencia el día lunes, en el Ministerio de Alem. Con esa agenda, los trabajadores siguieron con el acampe en los portones de las tres fábricas. Durante la toma del Ministerio de Trabajo, de parte del Ministro se realizó una denuncia ante la Justicia Penal por la ocupación del 4to piso del Ministerio, que recayó en el juez federal Daniel Rafecas. Claudio Moroni incluso había ordenado suspender las negociaciones y desalojó el edificio de Callao mientras se mantenía la ocupación. A distintos medios, el Ministerio había anunciado que no se iban a continuar las negociaciones hasta que no se levantara la ocupación de la sede del Ministerio de Callao. El lockout patronal cuestiona la audiencia del lunes y la supuesta voluntad de diálogo de parte de las patronales.
Bridgestone fue la primera empresa en anunciar el cierre por tiempo indeterminado.
El comunicado que dió a conocer la patronal deja en claro que el objetivo es quebrar la huelga. Agrega que mientras dure el lockout no se van a pagar los salarios.
Por su parte, Pirelli anunció internamente que a partir de que se termine el stock de insumos cerraría la planta. Los trabajadores que asistieron a trabajar a pesar del paro general fueron mandados de vuelta a sus casas por la patronal. A partir de hoy sábado a la noche la planta cerrará sus puertas.
Fate anunció a los medios que envió una carta documento al SUTNA donde exige que cesen las medidas de fuerza para poder retomar las actividades, y solicitan que se les notifique el levantamiento de la huelga 24 horas Fate apagó el viernes todas las calderas de la planta.
La decisión de Bridgestone, Fate y Pirelli de recurrir al lockout, lo que constituye una práctica desleal, amenaza desatar una crisis industrial fulminante.
Las terminales automotrices han señalado que Bridgestone provee de cubiertas a la mayoría de las pick-ups que se hacen localmente. Entre ellas, Hilux, el motor con el que Toyota ambiciona alcanzar las 170.000 unidades. También resultan afectadas Renault y otros "Si esto sigue así, ninguno está en condiciones de seguir produciendo mucho más allá de la próxima semana", agregó el CEO de otra terminal" (El Cronista, 23/9). El lockout patronal amenaza paralizar a la industria automotriz.
Los trabajadores continúan desde el miércoles un paro general, acompañado de piquetes en los ingresos a las plantas. Convocaron para el día lunes próximo a una movilización al Ministerio de Trabajo a las 11 de la mañana.