Escribe Emiliano Fabris
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El 17 y 18 de octubre se realizarán las elecciones de la Asociación de Docentes de la Universidad Nacional del Sur (ADUNS). La novedad está planteada en primer lugar por la división de la conducción actual. A la “Lista 1 – Frente de Unidad por los Derechos Docentes” la encabeza el actual secretario general, Sergio Zaninelli, y la “Lista 3 Intersecciones” reúne al kirchnerismo aliado de Zaninelli durante las últimas dos elecciones del sindicato en 2014 y 2018.
Zaninelli, luego de una ferviente militancia con el kirchnerismo y de ser candidato en las listas del PJ, hoy se posiciona como un crítico del gobierno. Forma parte, no obstante, de la actual conducción de la CONADU H junto con el PCR y el deggenarismo, una conducción que viene de dilatar medidas de fuerza ante un cierre escandaloso de la paritaria salarial. En su lista participa, como en elecciones anteriores, el gandolfismo (Rompiendo cadenas), el Partido Comunista y otros activistas independientes, que vienen de participar de la movilización en apoyo al gobierno que se convocó a raíz del atentado a CFK.
Otra novedad es la integración a la lista de Zaninelli, como minoría, del Partido Obrero (oficial), que representó la única oposición a Zaninelli en las últimas dos elecciones y es la actual minoría de la comisión directiva saliente. También se incorpora el PTS. Hace pocos meses, Zaninelli compitió contra el FIT-U en las elecciones de la CTA Bahía Blanca, en donde resultó ganador –con denuncias de fraude mediante- la lista encabezada por ATE (Cachorro Godoy).
Oportunismo al palo
Zaninelli no ha presentado un balance ni ha propiciado un debate de este giro ante la base de afiliados de la UNS, a pesar de que se postula nuevamente para encabezar la conducción. Defendía muy recientemente en las asambleas del gremio al gobierno ‘nacional y popular’ y la ‘unidad’ con las burocracias sindicales de CONADU, CTERA, Fedun, UDA. Durante el gobierno de Macri, con un fuerte ascenso de la lucha educativa, se sumó al operativo kirchnerista “hay 2019”, es decir, hipotecar la lucha para una contienda electoral de más de un año de espera. Ahora, sin mediar explicación alguna, y ante el hundimiento político del gobierno de Alberto-CFK, Zaninelli rompe, pero se reserva el derecho de seguir estando al frente.
La lista 1 no ha presentado un programa ni ninguno de sus otros integrantes publicaron balances previos o delimitaciones. La lista no emergió de un debate del conjunto del activismo del sindicato que se reconoce independiente del gobierno y las patronales. Es un acuerdo por arriba bajo el liderazgo indiscutido de Zaninelli.
En 2018, Prensa Obrera caracterizaba que Zaninelli “lleva más de 15 años como Secretario general y maneja el sindicato de manera personal” (22/10/2018) ante la ausencia completa de reuniones de comisión directiva. La alianza del aparato del PO con quien fuera su enemigo político por décadas, bajo estas condiciones, es una consciente “unidad en la confusión” y se traduce concretamente a una adaptación al filokirchnerismo. Cargos mata programa, trayectoria.
La ausencia de una clarificación política manifiesta un oportunismo sin principios, sin solución de continuidad. La base docente de la UNS tiene la palabra.