Escriben Diego Carrazán y Adrián Freye
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La Coordinadora de Limoneros Autoconvocados profundizó su plan de lucha con cortes de rutas, el viernes 14, en tres puntos del interior provincial – Tafí Viejo, Acheral y Concepción. En los cortes se hicieron presentes delegaciones representativas de 11 sectores del interior provincial: Aguilares, Alpachiri, Molino, Concepción, La Cocha, Famaillá, Santa Lucía, Acheral, Tafí Viejo, Villa Carmela y León Rougés.
La jornada de lucha de los obreros del limón coincidió con la jornada de lucha nacional motorizada por el Polo Obrero Tendencia. En los cortes limoneros también se hicieron presentes delegaciones del Polo Tendencia, abriendo las vías para una coordinación de los reclamos y las acciones de lucha.
La semana pasada ya se habían realizado ollas populares al costado de la ruta como advertencia al Gobierno ante la falta de respuestas a los reclamos presentados semanas atrás: un subsidio intercosecha de $60 mil, indexado mensualmente por inflación; obra social todo el año; pago de todas las diferencias de temporada; rechazo a la persecución de los luchadores; reincorporación inmediata de los obreros despedidos. El pliego de reclamos de los obreros del limón está conformado por reivindicaciones elementales de sobrevivencia. A pesar de ello, el gobierno ha guardado silencio.
Otra ha sido la actitud, en cambio, frente a los reclamos de las cámaras empresariales del citrus. Jaldo se comprometió a gestionar el reclamo por un “dólar limón”, que de concretarse les generaría grandes beneficios a las patronales citrícolas. Otro tanto ocurrió en la Legislatura, presidida por el manzurista Mansilla. Impulsada por el gobernador, con el apoyo de todos los bloques patronales, se declaró la “emergencia citrícola”, por 365 días, beneficiando con rebajas impositiva. Desde la legislatura se llamó a los municipios a sumarse a estas normativas. Paralelamente el gobierno provincial está gestionando la declaración de la “emergencia citrícola nacional”, beneficiando a las patronales con la exención del pago de todo tipo de impuestos.
La falta de respuesta de parte del gobierno a los reclamos obreros obliga a profundizar el plan de lucha. Estas semanas son críticas. Muchos trabajadores están migrando a la cosecha de distintas provincias, en especial a Río Negro y Mendoza. Entre los que se quedan, gran parte ha sido contratado en la cosecha del arándano, bajo un nivel de superexplotación extremo: el jornal llega a los 800 pesos, lo que significa que trabajando 30 días sin parar apenas llegan a cubrir menos de la mitad de una canasta de indigencia.
Frente a este panorama, la UATRE, recientemente intervenida por la conducción nacional, está enfrascada en una pulseada entre la camarilla interventora encabezada por Germán Ferrari, y los intervenidos, cuyo referente es “Remache” Ferreyra, dando la espalda a los reclamos obreros.
La Coordinadora de Limoneros Autoconvocados ha demostrado su disposición a ir a una lucha hasta alcanzar los reclamos de los trabajadores. En función de ello se ha decidido impulsar la realización de un plenario provincial de obreros del citrus y en paralelo darle continuidad, extendiendo las acciones de cortes y bloqueos en las próximas semanas.