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Gabriela Carpineti, directora Nacional de Acceso a la Justicia, radicó una denuncia en el Juzgado Federal 12 de la Capital Federal, a cargo de Ariel Lijo, contra la presencia de “patotas raciales” en la Patagonia (Clarín, 10/12).
Advierte que estos grupos filonazis convocan a “cazar mapuches” y a “sacar la basura de nuestros territorios”, por referencia a los pobladores originarios. La Legión Nacional Patriota, tal la denominación de esta banda, se autodefine como “un grupo formado solamente por vecinos, patriotas, gauchos, todos argentinos, sin ideología política”.
En Bariloche esas expresiones no sorprenden. El “huevo de la serpiente” lleva largo tiempo incubándose al abrigo de intereses capitalistas poderosos y del Estado.
En nuestra ciudad se reúne sistemáticamente un rancio producto del racismo protofascista que llaman “Foro Consenso Bariloche”, en el que participan tanto figuras del PRO como pinochetistas de Chile, expertos en combatir al pueblo mapuche en la Araucanía, actualmente en estado de sitio bajo el gobierno del ´socialista´ Boric.
Estos grupos no sólo apañaron los asesinatos ´institucionales´ de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel, a manos de Gendarmería y Prefectura, respectivamente, sino que ya han tenido su bautismo de sangre.
Cuando en noviembre del 2021 la lof Quemquemtrew ecuperaba su territorio estaba sitiada por fuerzas federales, entraron a Cuesta del Ternero dos sicarios y asesinaron a Elías Garay. Se produjo una pueblada en El Bolsón para que los criminales fueran detenidos – actualmente están siendo juzgados. Pero cuando la población rodeó el hospital donde se encontraba internada una segunda víctima, Gonzalo Cabrera, irrumpió una banda fascistoide de gauchos a caballo, visiblemente alcoholizados, que atacaron a rebencazos a los manifestantes. Este ataque fue avalado por el intendente Bruno Pogliano, ex contador de Joe Lewis. Fue una de las primeras apariciones de esta Legión. Cuando se produjo la ´recuperación´ de un lote de tierras en la ribera del lago Mascardi, los ´buenos vecinos´ protagonizaron un verdadero desfile armado. Otra manifestación de este tipo finalmente fue prohibida por orden judicial, pero el contraste entre el trato benévolo que reciben los fascistoides y la persecución a los mapuches, por parte del poder político, es evidente. Los ´republicanos´ que frecuentan Lago Escondido para complotar deben estar al tanto de estas actividades.
La denuncia de la funcionaria parte de información obtenida de capturas de pantalla en los que se incita a organizarse contra la comunidad mapuche para “proteger nuestra Patagonia y futuro, es la hora de enfrentarse a estos pocos parásitos que están arrasando con la zona y la población. Es tiempo de que el pueblo se levante y saquemos de una vez por todas a esta gente que no es ni será parte de la Patagonia”. Los choques entre pueblos originarios y los diversos gobiernos “parásitos”, agentes de los intereses mineros e inmobiliarios, son constantes. Vaca Muerta es un centro de conflicto con la población trabajadora y los mapuches. Hace apenas unos días coincidieron en el corte de ruta que paralizó el funcionamiento del yacimiento por reclamos ambientales, contra posibles desalojos y por la provisión de agua potable.
Estas bandas al servicio de los Lewis, Benneton, los Rocco y los grandes capitalistas que saquean nuestra región, evocan a la Liga Patriótica Nacional de los años 20 del siglo pasado. Un grupo decididamente fascista, responsable de acciones criminales contra los trabajadores durante la Semana Trágica en Buenos Aires y en los hechos de la Patagonia Rebelde.
Otra vez una crisis capitalista, esta vez mucho más profunda, terminal; da lugar a la proliferación de estos grupos que deben ser denunciados y combatidos por los trabajadores.
