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Este lunes 3 de abril se celebra el Día de los Trabajadores y Trabajadoras de la Industria del Papel. Esta industria es una de las que tiene los salarios más bajos del país, quedando debajo de la canasta básica familiar y rozando la línea de la pobreza.
Para revertir esta situación tenemos que tener en cuenta que este no es un día para celebrar, sino para concientizarnos de la lucha que debemos afrontar ante el triángulo Patrones-Gobierno-Burocracia Sindical, que nos empuja a vivir en condiciones precarias, de superexplotación y de pobreza en la que estamos inmersos.
Para eso, los trabajadores del papel debemos asumir y tomar en nuestras manos las tareas que ni el gobierno y ni las burocracias están dispuestos a llevar adelante: la defensa de nuestros salarios, puestos de trabajo y condiciones laborales.
Todo esto a través de una organización que pase por encima del aparato sindical, llamando a todos los trabajadores de base a formar parte de una nueva dirección que nos lleve al verdadero triunfo, donde nuestras principales herramientas sean las asambleas de base, fábrica por fábrica, y plenarios, los cuales deben ser de carácter resolutivo elevando nuestros mandatos, decidiendo nosotros mismos qué es lo que queremos los trabajadores, algo que la burocracia sindical no está dispuesta a hacer, ya que en los hechos sus maniobras tienden a destruir y dividir a los laburantes, su autoorganización y autodefensa, en pos de preservar sus privilegios a cambio de míseros aumentos, aceleración de ritmos de trabajo y condiciones de trabajo cada vez más precarias.
Llamamos a los trabajadores y trabajadoras del papel a poner en pie una organización que enfrente a nuestros enemigos, los enemigos de la clase trabajadora, para golpear todos unidos, como un solo puño, y derrotar las políticas de ajuste que sintonizan los patrones, el gobierno y su cómplice, la burocracia sindical.
