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La UOM está anunciando que, si no hay acuerdo en la reunión pactada en el Ministerio de Trabajo para este jueves 13 de abril, a partir de las 14 horas, se paralizarán las fábricas siderúrgicas.

Este anuncio obedece a que las grandes empresas ni siquiera quieren replicar el ruinoso aumento conseguido por Furlán con las metalúrgicas, de 10 % a partir de abril y 8 % acumulativo en mayo, más una revisión para julio. Dicho acuerdo habilita a que, por convenio, un metalúrgico trabajando el mes completo no pueda percibir menos de $152.664 en abril o $166.487 en mayo. En el caso del ingresante (categoría valida por 6 meses), el salario mensual es menor ($635,53 por hora en abril y $686,37 por hora en mayo), en todos los casos, por debajo de la canasta familiar.

La diferencia entre la UOM y la Cámara Argentina del Acero hoy consiste en que sean o dos o tres las cuotas aplicables sobre el salario conformado en el trimestre paritario (abril-junio). La “diferencia” muestra la voracidad de la patronal siderúrgica que hasta rechaza la mezquina recomposición salarial planteada por la UOM.

Entre los acuerdos firmados a la baja en el salario conformado, los aumentos que salieron no remunerativos y la inflación, los siderúrgicos hemos perdido casi un 40 % de poder adquisitivo en los últimos diez años. La pelea planteada es para que la categoría de ingresante alcance a cubrir la canasta familiar y que sea la base para el resto de las categorías de convenio. Recién entonces se va a empezar a recomponer el poder adquisitivo de todos los metalúrgicos. Pero la UOM sigue detrás de ver “cómo le empata o gana unos puntos” a la inflación, cuando el salario sobre el cual se pretende “empatar o ganar” ha sido pulverizado a lo largo de los años.

Pero el jueves difícilmente haya paro, porque la diferencia es insignificante. Por lo tanto, o se acuerda ese día o el Ministerio dictará una conciliación obligatoria para que las partes afinen un acuerdo.

Las y los metalúrgicos debemos poder vivir dignamente con nuestro salario y no depender de las horas extras y/o acuerdos en negro, solo para seguirla remando. Para cambiar con la actual situación, hay que ir por: salario inicial (Ingresante) igual a la canasta familiar ($270.000), indexado mes a mes y que sea tomado como piso para el resto de las categorías, respetando el resto de los adicionales tanto de convenio como conquistas particulares.

Es necesaria la organización mediante asambleas en cada lugar de trabajo para votar los objetivos y el plan de lucha a llevar adelante para conseguirlos.

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