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El pasado jueves una de las instituciones públicas más importantes de formación docente de la ciudad de Bahía Blanca, el Instituto Avanza, fue evacuado por segunda vez en lo que va del año. Un docente y tres estudiantes fueron atendidos por personal médico en el lugar y dos de ellos tuvieron que ser trasladados al hospital, por presunta intoxicación con monóxido de carbono. Sufrieron náuseas, mareos, dolor de cabeza y debilidad. Personal de Guardia Civil informó luego que la ventilación de los calefactores estaba afectada por “excremento de aves”. En mayo había pasado algo similar con una estudiante de 16 años, que concurría a la Secundaria 6, que funciona en el mismo edificio junto con una escuela primaria. En esa ocasión se detectaron pérdidas de gas en los calefactores. Desde el inicio de la cursada, en el Avanza se ha pasado a clases virtuales en cuatro ocasiones por motivos relacionados con las instalaciones de gas.
El establecimiento fue declarado como patrimonio histórico provincial, una formalidad que no ha impedido su progresivo derrumbe, ya que hace años que se le han anexado unas chapas a su fachada para contener la caída de mampostería. En 2018, la crisis edilicia motivó una toma del instituto por parte de sus estudiantes. Entre 2021 y 2022, numerosas movilizaciones docentes culminaron en abrazos solidarios al establecimiento. Recientemente se ha construido ascensores que ya se han roto en el transcurso del año. Un abandono en toda línea.
Mientras tanto, desde inspección se presiona para continuar con la presencialidad a costa de la salud de la comunidad educativa. Los docentes son obligados a pasar a la virtualidad semanalmente, sin poder organizar sus clases y sin contar con los dispositivos necesarios. La evacuación de este jueves dejó a muchos estudiantes sin la posibilidad de rendir sus instancias evaluatorias.
Lo que queda en claro, al contrario de lo que sostiene la Lista Celeste local que responde a Baradel, es que la razón por la cual se pierden días de clase tiene que ver con las deplorables condiciones en las que se encuentran escuelas e institutos. El día después de lo sucedido en el Avanza, en una primaria de la ciudad se incendió un aula. Los docentes y auxiliares en lucha, que han realizado paros a lo largo de este año, son los que han puesto de manifiesto esta situación de degradación educativa, sobrepasando en muchas ocasiones amenazas de descuento y de inspección.
Por esta situación, Suteba Bahía Blanca convoca a una concentración en el Consejo Escolar para el miércoles 12. Con urgencia, es necesario establecer una comisión integrada por docentes, estudiantes y familias para definir si existen las condiciones de seguridad y sanitarias para el dictado de clases. Lo que sucede en el Avanza es emblemático de una situación de derrumbe del conjunto en las escuelas públicas que debe ser respondido con una lucha decidida.
