Balance del Encuentro de Mujeres en Bariloche

Escribe Alejandra del Castillo

Tiempo de lectura: 3 minutos

Pese a la lejanía y los costos del viaje en el cuadro de la carestía y empobrecimiento generalizados, este 36° Encuentro Nacional de Mujeres en Bariloche dio cita a cerca de 70.000 mujeres de todo el país.

Esta enorme convocatoria podría haber sido la oportunidad de discutir y resolver un plan de lucha contra la ofensiva capitalista que agravará aún más las penurias de las mujeres trabajadoras y del conjunto de la clase obrera. Sus organizadoras y todo un arco de organizaciones que responden al gobierno, por el contrario, buscaron torcer el debate para que las participantes del Encuentro voten a Massa, al que presentaron como el mal menor. También intentaron acallar a las mujeres mapuches en la apertura y durante la propia marcha, donde las compañeras se tuvieron que adelantar a la cabecera de la movilización para que se visibilicen sus reclamos, y al Tercer Malón de Jujuy a quienes no querían dejar subir al escenario.

Apelaron a la instalación del miedo bajo el argumento de que Milei, principalmente, y Bullrich, son la “ultraderecha” y que con ellos se vendría la noche. Muchas, en los talleres, llegaron a reconocer la debacle del gobierno y su responsabilidad en la crisis, pero aun así no se apartaron del operativo “mal menor”. Esta confesión de parte vino después de los relatos de trabajadoras precarizadas y bajo la pobreza, de las compañeras de las barriadas que enfrentan el vaciamiento de la salud y la educación y el avance del narcotráfico, de las víctimas y familiares de víctimas que denunciaron a la policía, a la justicia y al conjunto de las instituciones del Estado. También luego de que gran parte de las concurrentes plantearan que los derechos conquistados, como el aborto legal, fueron arrancados con la lucha y no como resultado de la bondad de los gobiernos, en particular del gobierno peronista-kirchnerista.

Pese a que los medios oficialistas, las funcionarias y las burócratas de las organizaciones oficialistas buscan mostrar al Encuentro y su multitudinaria marcha como un pronunciamiento contra los Milei y la derecha, salvando al gobierno y a su candidato Massa, la deliberación y clima en la mayoría de los talleres tuvo otro carácter. Las compañeras de Política Obrera que participamos en los talleres de trabajo, desocupación, organización barrial, trata, abusos, femicidios, violencias y organización, que no se desdoblaron funcionando como una única comisión, estuvieron recorridos por la inquietud de qué hacer luego del 22. El planteo de preparar las autoconvocatorias y coordinaciones y la necesidad de preparar una huelga general que realizaron nuestras compañeras fueron escuchados con respeto, en algunos talleres, incluso nuestro planteo fue coronado con aplausos. Este clima también se pudo verificar en la colocación de nuestra declaración, pero principalmente de nuestra prensa. En la apertura y también en los talleres se logró colocar una importante cantidad de periódicos. Cabe destacar que en los talleres de educación y universidad se apostaron las burócratas, quienes por todos los medios trataron de obturar el debate, aunque no lograron callar a nuestras compañeras.

El FIT-U, a pesar de que tomando los cuatro partidos conformaron una delegación numerosa, no tuvo una intervención destacada en los talleres. Tampoco lo hizo de manera unificada. El PTS se limitó a agitar la candidatura de Bregman, en los pocos talleres que intervino, despojada de cualquier programa que llamara a una intervención del movimiento de mujeres y la clase obrera. El Partido Obrero intervino con planteos reivindicativos, evitando pronunciarse por la cuestión electoral, y el MST se aggiornó al planteo del kirchnerismo agitando el avance de la ultraderecha.

El cuadro de agravamiento de la crisis, con la devaluación que vendrá después de las elecciones y la contrarrevolución laboral y social que debe llevar adelante el gobierno que asuma, plantea la necesidad de extender el debate que se desarrolló en el encuentro desenmascarando a quienes buscan maniatar al movimiento de mujeres para que no sea un factor en el convulsivo proceso político y social que las elecciones no harán sino agravar.

La preparación de la jornada del 25 de noviembre, día internacional de lucha contra la violencia hacia las mujeres, es la oportunidad para poner en pie las asambleas y discutir un programa.

LEER MÁS:

Terminó el 36° Encuentro de Mujeres en Bariloche Por Elena Florín, 16/10/2023.

Otra vez más, vamos por un plan de lucha de la mujer trabajadora Por Organización Socialista de la Mujer Trabajadora, 03/10/2023.

Suscribite al canal de WhatsApp de Política Obrera