Por el pago del 100% de los salarios en Limpiarg

Escribe Mercedes Colau

Tiempo de lectura: 2 minutos

Limpiarg S.A., empresa de servicios de limpieza y mantenimiento de espacios verdes, guadañó, en medio de la pandemia de Covid-19, los salarios de sus trabajadores.

La inmensa mayoría de los trabajadores de maestranza son pobres porque sus salarios promedios están por debajo de la línea de pobreza que mide el Indec.

A principios de mayo los trabajadores se enteran, por medio de un audio de WhatsApp difundido por la empresa, que los salarios de abril no se abonarán en su totalidad como lo establece el decreto 297/20 en su artículo 8.

El anuncio sorprendió a todos los trabajadores de maestranza del país y, muy especialmente, a los trabajadores de Limpiarg porque la mayoría de estos nunca dejó de trabajar desde que se decretó el “aislamiento social, preventivo y obligatorio”. Sucede que los principales clientes de la empresa son grandes cadenas de supermercados, farmacias y hospitales.

El sector de limpieza es considerado desde el momento cero del “aislamiento social” como un rubro esencial, tan esencial que sin el trabajo de los obreros de maestranza no podrían haber operado supermercados, hospitales, farmacéuticas e industrias de diversa índole como la industria de la alimentación.

El acuerdo de la infamia

El sindicato de maestranza, dirigido por Rojas, quién milita en el campo de la burocracia barrionuevista, pactó con la cámara empresaria del sector, ADEL, a espaldas de los trabajadores, lo mismo que la CGT con las cámaras empresarias nacionales, una reducción de salarios escandalosa. En el acuerdo firmado el pasado 23 de abril, que se apoya en el artículo 223 bis de la LCT para proceder a suspensiones y rebajas salariales a granel, la patronal divide las reducciones de salarios en dos grupos. En el grupo 1 están los trabajadores que al ser grupo de riesgo no prestaron servicios: a estos trabajadores se les paga el 50% del salario de neto. El grupo 2 se compone por aquellos trabajadores que sí prestaron servicios durante 15 días del mes, a ellos se les paga el 50% del salario neto más $300 por cada día trabajado.

La mayoría de ellos trabajaron más de la mitad de las horas laborales mensuales puesto que sus jornadas eran de 10 horas diarias. Entonces, en 15 días trabajados del mes las horas totales son 150 que constituyen 2/3 de las horas laborales del mes. Finalmente, aquellos trabajadores que trabajaron los 30 días del mes se les paga el 100% del salario. Por si fuera poco, esta poda brutal de los salarios la patronal procedió al descuento del aumento “a cuenta de futuros aumentos” establecido por el decreto 1420/20 que percibieron los trabajadores del sector privados a principios de año. El decreto en cuestión establece en su artículo 2 que el aumento otorgado será “absorbido en futuras paritarias”.

La frutilla del postre de esta ofensiva contra el salario y las condiciones de trabajo, excusándose en la crisis sanitaria, lo constituye el intento de la patronal por embolsarse los ATP que pone el Estado para completar el pago de los salarios de abril. En un insólito audio de WhatsApp, el responsable de la empresa “informa a los empleados” que en estos días se depositarán aproximadamente 16 mil pesos de los ATP pero que serán descontados con el salario a cobrar en junio. Eso sí, informan con tiempo sobre el saqueo al bolsillo del trabajador “para que puedan organizar sus gastos adecuadamente”.

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