La Iglesia Católica propone legislar contra del derecho al aborto
Tiempo de lectura: 4 minutos
Las cinco arquidiócesis de la Iglesia Católica de Santa Fe han firmado un comunicado que se posiciona respecto a la reforma de la Constitución de la Provincia. Su posición se suma a la del Gobierno y la oposición patronal en cuanto a presentar a la reforma como una “mejora democrática”.
Reivindica “las propuestas orientadas al fortalecimiento de las autonomías locales, a la responsabilidad fiscal en la administración de los bienes públicos, al límite a la reelección y a la representación plural y profesional en el proceso de selección de miembros del Poder Judicial”. Advierte, sin embargo, por el “ausentismo en los comicios del domingo, o sea la abstención: Llama a un voto responsable y recuerda que es obligatorio. Todo muy convencional, pero que contrasta con el objetivo laicista que Pullaro le asigna a la reforma, que, dice, establecerá la separación de la Iglesia del Estado.
Como se ve enseguida, sin embargo, Pullaro pretende acoger al estado a todos los cleros religiosos. El texto de la Iglesia Católica se mete en una pelea de rapiña por el reparto de los recursos del Estado entre las diferentes iglesias, a partir del reconocimiento de la labor común entre el ámbito laico y “todos los cultos”. Es conocido públicamente que el gobernador Pullaro tiene su preferencia por los sectores evangélicos. Por eso propugna una mayor transferencia de recursos estatales a las diferentes iglesias, para reforzar la presencia de éstas en los barrios, las escuelas, los hospitales y en las cárceles. Por lo visto, el “equilibrio fiscal” queda en un segundo plano a la hora de bancar al clero.
“Por fuera” de la agenda de la reforma, la Iglesia plantea que los convencionales respeten el derecho de la vida por nacer; lo colocan como el “derecho madre de todo derecho: resguardar y promover la dignidad de la vida humana en cada una de las etapas de su desarrollo, desde la concepción hasta su término natural”.
Que el derecho al aborto no se incluya en los 42 artículos a reformar es ominoso, no solamente porque se trata de una cuestión de salud pública (de mujeres y niños), y de derechos personales de las mujeres (y, en última instancia, de hombres que son parejas o padres de ellas) sino porque justifica más recortes a la asistencia social a mujeres y disidencias que quieran seguir accediendo a este y otros derechos. Justamente, desde Política Obrera venimos denunciando que el objetivo de garantizar el déficit cero y el equilibrio fiscal en la Constitución no apunta a establecer impuestos progresivos a los mayores ingresos y el retiro de los subsidios estatales a los capitalistas, sino a servir de excusa para recortar el presupuesto de salud, empleo, educación y vivienda; desmantelar equipos de trabajo, dar de baja capacitaciones y precarizar aún más la mano de obra sanitaria, que ya se encuentra expuesta a condiciones de trabajo y salariales deplorables. Existe una situación desesperante para el acceso a la salud y los derechos sexuales y reproductivos en la provincia.
El comunicado de la Iglesia Católica sobre la elección de convencionales constituyentes en Santa Fe, desvirtúa el carácter democrático que el gobierno y el panel de partidos ‘progres' le atribuyen a la Reforma. La retrasada actualización de la Constitución de 1962 no es un avance de los derechos políticos, porque no contrarresta, sino que reafirma y refuerza la abolición de los derechos laborales y sociales, que han venido en aumento en estos más de sesenta años. Mientras que la ‘progresía’ quiere que la Constituyente se declare soberana, cuando no tiene los votos ni el reclutamiento popular para ese propósito, la coalición de partidos patronales y los cleros religiosos, proponen votar un paquete único, debidamente atado, en una fecha que varía desde el día siguiente a la clausura de la Convención hasta las vísperas de las elecciones de 2027.
Como hemos mencionado en nuestra declaración y toda nuestra campaña, los acuerdos sobre esta reforma llevan a la clase trabajadora a un mayor detrimento en las condiciones de vida en materia de trabajo genuino, salarios, jubilaciones y a un menor acceso a la salud y a la educación laicas y científicas.
Queda todavía la posibilidad de que Pullaro pretenda constitucionalizar el “estado de excepción”, o sea el gobierno por decreto y estado de urgencia, como se encuentra establecido en la Constitución Nacional reformada en 1994, y en once provincias con posterioridad. Esto sería, en la actualidad, un paso a la derecha –hacia un régimen liberticida, como desea Milei-. Los distintos sectores religiosos siempre están dispuestos a ir contra derechos universales como el acceso al aborto seguro y gratuito o el derecho a la ESI laica, a la identidad de género, a la autonomía de decidir sobre el propio cuerpo; y, sobre todo, para contener la miseria y el descontento que el déficit cero y el equilibro fiscal vienen a consagrar.
La reforma santafesina no ha dado lugar a debates, por la intención del régimen de que pase sin noticia sobre ella. Los socialistas revolucionarios debemos aprovechar la circunstancia para debatir a fondo y desenmascarar sus propósitos. No existen Constituyentes ‘mejores’ que las de Pullaro, cuando son convocadas por la burguesía y su aparato estatal. No oponemos a esta Constituyente otra Constituyente. Los socialistas debemos desenmascararlas en todos sus propósitos, para hacer avanzar la consciencia revolucionaria de clase de los trabajadores. No nos motivan avances “institucionales” sino la organización de las masas bajo las banderas de un programa socialista.
Santa Fe: la Constituyente reaccionaria “ordena” a municipios y comunas de acuerdo a los dictados de Milei y el FMI Por Gustavo Fenoy, 21/03/2025.
Nos proponen una reforma constitucional en línea con Milei y Trump Santa Fe. Por Política Obrera Santa Fe, 11/03/2025.