Merlo: Menéndez hambrea a miles de trabajadores municipales con la complicidad del PRO y LLA

Escribe Julio Gudiño

Tiempo de lectura: 2 minutos

El pasado 1º de agosto el intendente peronista de Merlo, Gustavo Menéndez, anunció con bombos y platillos un aumento salarial de 25% para los trabajadores municipales de Merlo y manifestó estar “feliz de poder otorgar este aumento (...) con gran esfuerzo y orden en nuestras cuentas” (zonanortediario.com.ar, 1/8).

El aumento salarial que festejan Menéndez, de Fuerza Patria, y José Núñez, Secretario General del Sindicato de Trabajadores Municipales de Merlo, representa, en promedio, 30 mil pesos extras por mes ya que el “25% de aumento” se aplica sobre un básico de 90 mil pesos. Los trabajadores municipales del país y, en particular de la provincia de Buenos Aires, que realizan tareas fundamentales para la sociedad (salud, educación, obra pública, limpieza de calles, mantenimiento de luminaria, etc.) perciben salarios básicos miserables y salarios conformados que están por debajo del, también miserable, salario mínimo vital y móvil establecido por decreto por Milei-Caputo (310 mil pesos). Esta situación salarial lacerante para el conjunto de los trabajadores municipales es apoyada por la “oposición” agrupada en el PRO y la LLA con el eufemismo de defender “el equilibrio fiscal” del Estado municipal.

Menéndez adelanta el “aumento salarial” un mes antes de las elecciones provinciales con el claro objetivo de posar como el “intendente amigo” de los trabajadores. Estas poses no pueden ocultar que el salario del trabajador municipal está muy por debajo de la línea de indigencia y, fundamentalmente, la enorme precarización de los municipales. Sucede que en los últimos años la política de los Othacehé y Menéndez apuntó a reemplazar trabajadores de planta y bajo convenio colectivo de trabajo por trabajadores de cooperativas o monotribustistas que tienen salarios iguales o más bajos que el trabajador bajo convenio pero que no tienen derecho a enfermarse o estudiar porque si no trabajan le descuentan el día. Esta ofensiva de carácter mileísta fue enfrentada por los municipales con diversas medidas de lucha, siendo la más emblemática las huelgas de los trabajadores de los hospitales municipales que enfrentaron a las patotas del intendente y la represión de la policía de Kicillof.

Este estado de situación de los trabajadores municipales -salarios miserables y precarización labora- subsiste gracias a la infinita colaboración política de la burocracia sindical (S.E.M.M / F.S.T.M.P.B.A) que agradeció “el compromiso del Gobierno Municipal. Vemos que se hizo un gran esfuerzo. Que nuestros trabajadores sepan que estamos en el camino de la recomposición salarial, desde un rol racional sin perder nuestra identidad”. Por su parte, el FE.SI.MU.BO rechazó la propuesta salarial de Menéndez y planteó un horizonte de infinitas negociaciones parlamentarias para que se reglamente el Consejo Provincial del Salario (ley 14.656) cosa que, naturalmente, dormirá el sueño de los justos.

Desde Política Obrera planteamos: salario igual a la canasta familiar, el pase a planta de todos los trabajadores cooperativistas y monotributistas y que todo pliego de reivindicaciones debe ser elaborado y votado por asambleas de trabajadores. Qué ningún acuerdo se firme sin que sea refrendado por la asamblea.

Revista EDM