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Los trabajadores de las 50 empresas contratistas dentro de Siderar llevan adelante el tercer día de huelga. Las asambleas siguen exigiendo imponer una nueva escala salarial buscando salir de la pobreza que garantiza el ya cada vez más devaluado salario de convenio.
El genuino reclamo de los trabajadores es usado a la vez por los dueños de las empresas contratistas, que buscan mejorar su facturación planteando que podrían dar el aumento sólo si Siderar acepta subir el canon.
A la cabeza de la UOM San Nicolás se encuentra (desde 1973) Naldo Bruneli, que también viene siendo parte del secretariado nacional del sindicato, ocupando actualmente el cargo de secretario adjunto, y además es diputado provincial por UxP. Tanto con Antonio Caló como ahora con Abel Furlán, los dirigentes de la UOM han cerrado acuerdos a la baja llevando a los metalúrgicos a los actuales niveles salariales de pobreza.
Tanto el reclamo salarial como el de las condiciones de trabajo llevaron a los trabajadores tercerizados a superar la barrera del temor y adoctrinamiento existente en la seccional San Nicolás. Las asambleas son nutridas y se nota la voluntad combativa de los trabajadores.
Ayer desde Siderar lanzaron la amenaza de comenzar a paralizar la planta si no aceptan las migajas ofrecidas. La posición de los trabajadores es ir hasta el final, ya que muchos plantean que no tienen nada más que perder.
Las asambleas van resolviendo los pasos a seguir en este contexto donde si bien existen muchos factores en contra (importaciones, baja producción), pero con la cabeza puesta en la lucha los trabajadores tercerizados de Siderar están señalando un camino al resto de los metalúrgicos.
Todo el apoyo a la lucha de los tercerizados.
