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Ayer a la noche en el sector de semielaborado, un trabajador del grupo C perdió cuatro dedos mientras operaba una máquina (Bandina). Los trabajadores denuncian que esa máquina, al igual que otras de la fábrica, estaba “perreada” (se refieren a la anulación momentánea de los sistemas de seguridad). Este modus operandi lo impulsan las patronales para eliminar tiempos muertos y aumentar la productividad del trabajo.
La amputación de los dedos del operario se produce en el marco del clima de terror que construyeron las patronales sobre la base de despidos arbitrarios e ilegales, suspensiones y sanciones a diestra y siniestra. Simultáneamente a este hecho, opera sobre los trabajadores la presión ejercida por la miseria salarial, que los obliga a cumplir con objetivos de producción para cobrar luego estos adicionales.
Este tipo de “accidentes laborales”, que correctamente hablando deberíamos llamar crímenes, por regla general son siempre responsabilidad de la clase capitalista, que considera la inversión en seguridad e higiene industrial como un costo que afecta su ganancia, mostrando un total desprecio de clase por la única propiedad que tiene el trabajador en este régimen social, su fuerza de trabajo, que es su vida misma. En 2021, perdió su vida mientras trabajaba Marcelo Ulariaga quien fue chupado por una máquina cuyos sistemas de seguridad no funcionaban. En aquel entonces, los trabajadores, junto a la dirección del sindicato, pararon la producción inmediatamente y convocaron a una asamblea general que votó un paro de 48 horas. Bridgestone y Fate se habían plegado a la protesta con un paro de 2 horas en solidaridad con los trabajadores de Pirelli.
Sin embargo hoy, luego de esta tragedia, la producción continuó con normalidad porque en la fábrica Pirelli hay un vacío de dirección. Esto debido a que el cuerpo de delegados esta diezmado por la renuncia de la gran mayoría de ellos y a la inexistencia de una dirección seccional, por la negativa de la lista Negra a convocar un balotaje para definir los resultados de las elecciones que se produjeron hace dos meses atrás, y que arrojaron un empate.
Se ha planteado la necesidad de convocar a una asamblea que discuta y vote un programa de acciones inmediatas, que deben contemplar:
