Los trabajadores de la salud en el centro de la pelea
Escribe Carlos Blanco - Junta Interna Hospital “Eva Perón” (Granadero Baigorria)
Balance de la jornada del 21en Santa Fe.
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La jornada 21S, convocada por los trabajadores de Enfermería, tuvo en Santa Fe diferentes expresiones, todas de enorme importancia, porque tuvieron que resolverse sin la intervención de los sindicatos que le dieron la espalda. Las iniciativas surgieron a partir de autoconvocatorias o fueron organizadas por cuerpos de delegados.
La jornada de lucha
Hubo corte en la Ruta 11, frente al Hospital Psiquiátrico de Oliveros. En el Hospital Provincial Centenario, el más importante en Rosario, se realizaron denuncias y reclamos de las diferentes salas mediante fotos y un video. En el Hospital Gamen, de Villa Gobernador Gálvez, y en el hospital de Casilda, se realizaron acciones organizadas por los delegados. En los hospitales más grandes de la ciudad de Santa Fe, el Iturraspe y el Cullen, hubo autoconvocatorias con la participación de la Asamblea de Precarizados Estatales de esa ciudad.
Frente al Hospital “Eva Perón” de Baigorria se realizó una importante jornada que incluyó una marcha hacia el Hospital Modular-Covid, instalado en el mismo predio. La medida organizada por la Junta Interna del “Baigorria” tuvo una amplia repercusión en los medios de prensa, expresó claramente, con las denuncias y un programa, las tendencias profundas que recorren a los trabajadores de la salud frente a la catástrofe social que estamos enfrentando.
Hoy la provincia de Santa Fe, especialmente Rosario, están al tope de la tragedia en contagios y fallecidos, y, sin embargo, para el Ministerio de Salud “lo peor está por venir en los próximos dos meses”.
Las responsabilidades políticas
El desastre que estamos viviendo es consecuencia, por un lado, de la subordinación de la defensa de la vida de la población a los intereses de los grupos capitalistas que exigieron y consiguieron la apertura indiscriminada de la circulación para la mayoría de las empresas no esenciales en la ciudad y en los cordones industriales. Por el otro lado, por el rotundo fracaso de los pronósticos sobre el desarrollo de la pandemia y de la preparación para hacerle frente.
El “relato progresista” que le hicieron al pueblo, especialmente el intendente Javkin, es que en Rosario (y la provincia) no podrían colapsar dado que, en los 30 años de gobierno “socialista” en la ciudad, se había puesto en pie “un sistema de salud ejemplar” y de colaboración de la salud estatal con la medicina privada, en una política de regionalización de la Salud pública. Incluso fue esta la carta de presentación nacional del partido “socialista” y uno de los ejes fundamentales para la cooptación de corrientes políticas y sindicales de la centroizquierda, que hoy están apoyando el bloque del Frente de Todos.
La realidad en Rosario es que los hospitales municipales y el sistema de salud están al borde del colapso.
Esta crisis sacó a la luz el enorme sistema de precarización laboral que recorre tanto a los hospitales provinciales como municipales, es decir, al conjunto del Estado. En esta catástrofe sanitaria y social hay una gran responsabilidad política compartida entre el gobierno provincial de Perotti y el del Frente Progresista del municipio de Rosario. Ambos, sobre la base de considerar que en la provincia había un sistema de salud fuerte, dejaron pasar un tiempo de oro desde que se decretó la primera cuarentena. Desaprovecharon los meses con bajísimos contagios y no prepararon realmente al sistema de salud. El ejemplo más brutal de esto fue la inauguración del principal hospital Modular Covid de la provincia en Baigorria sin los médicos y enfermeros necesarios y capacitados para atenderlo.
Hoy quieren resolver esta catástrofe de la peor manera. Imponiendo una fuerte flexibilidad laboral, contratando enfermeros recién recibidos, sin entrenamiento, con salarios miserables y jornadas de 12 horas.
El gobierno provincial y el de Rosario coinciden en la improvisación frente a la crisis de la Salud y la extienden a su relación con los trabajadores y sindicatos.
Ambos acordaron con la postergación de las paritarias durante todo el año y su reemplazo con bonos no remunerativos, no bonificables y no acumulativos. Congelaron los pases a planta de varios miles de trabajadores y dejaron afuera varios cientos de trabajadores no renovándoles los contratos. Ambos defienden la precarización laboral y han sido solidarios a la hora de enfrentar el paro de los municipales en toda la provincia primero con la declaración de la conciliación obligatoria no respetada por la Federación Municipal y ahora con la amenaza de descuentos de los días de paro. Es el kirchnerista Zukerman, ministro de Trabajo de la provincia, quien impulsó una campaña alentando a los intendentes de las ciudades para que descuenten.
La organización de los trabajadores de Salud
En la jornada del 21, desde la Junta Interna del Hospital Baigorria denunciamos a la burocracia sindical de ATE y UPCN que entregaron nuestras paritarias y pusimos de relieve la unidad de intereses que existe entre los trabajadores de Salud que se manifiesta con el rechazo a los bonos en negro, el reclamo de un aumento de emergencia del 40%, la convocatoria a las paritarias, el pase a planta de todos los trabajadores precarizados, el repudio a la represión de las compañeras enfermeras en Buenos Aires y el rechazo a las amenazas de descuentos a los municipales donde muchos son trabajadores de salud.
Realizamos, finalmente, un llamamiento para avanzar en una coordinadora de lucha de los trabajadores de Salud regional y nacional para darle continuidad a esta gran jornada.
