Los “autoconvocados de la plaza” vuelven a quebrar la lucha de la docencia salteña

Escribe Julio Quintana

Tiempo de lectura: 4 minutos

Después de una semana de huelga, los autodenominados “autoconvocados de la plaza” han logrado quebrar y levantar la lucha de la docencia salteña. Para ello apelaron a maniobras escandalosas y forzaron una ruptura con parte de sus propias bases. Al momento de su levantamiento, la huelga promediaba un acatamiento superior al 50 %.

Lucha contra la entrega

Para intentar nuevamente levantar el paro, la dirección de los “autoconvocados de la plaza” tuvo que improvisar una nueva asamblea provincial, sin previo aviso, para el viernes. La maniobra buscaba impedir que participen las bases y los departamentos que, como Orán y Capital, realizaban ese mismo día sus asambleas departamentales. La maniobra salió a medias, porque el activismo de Capital, bajo la moción de los compañeros de la Tendencia Docente Clasista, decidió levantar su asamblea e ir a pelear a la asamblea provincial contra el levantamiento del paro.

Ante un activismo que los triplicaba en número y que propuso en primer lugar la elección de una nueva mesa de dirección de la asamblea para evitar las maniobras contra el uso de la palabra y votación de las mociones, los “autoconvocados de la plaza” decidieron retirarse y huir corriendo, literalmente. Semejante acción les produjo una crisis con sus delegados y bases de los departamentos de Cafayate y Metán, el sur provincial. Posteriormente, sacaron un comunicado anunciando el levantamiento del paro por una asamblea trucha, de menos de 15 personas, y denunciando a la “izquierda” y a sus propios compañeros de Metán. Ahora afirman que tomarán acciones legales contra los descuentos, una vía muerta bajo una justicia tutelada por el poder político, como lo demuestran las 117 cesantías docentes por la huelga anterior.

Ante semejante cuadro, docentes de Capital, Cerrillos, Cafayate y Rosario de Lerma, entre otros, intentaron superar esta entrega denunciándola públicamente y convocando a una nueva asamblea provincial para el sábado 2. A esta iniciativa se sumó el departamento de Orán. Sin embargo, el informe del conjunto de los docentes participantes en la misma puso en evidencia el grado de bronca y desánimo que había causado en las bases esta nueva maniobra de los “autoconvocados de la plaza”, por lo que se resolvió no continuar con la huelga.

Un balance

El levantamiento del paro por parte de los “autoconvocados de la plaza” consuma los descuentos de los días de paro bajo la figura de faltas injustificadas para miles de huelguistas. El gobierno salteño, como nunca antes, se ha apresurado a imponerlos con el cobro del mes de julio el mismo 1 de agosto. Las cifras descontadas son muy disímiles y desproporcionadas, lo que puso de manifiesto su carácter arbitrario y sancionatorio.

Este desenlace refuerza la posibilidad de nuevas cesantías selectivas por parte de Sáenz contra los activistas de la huelga, como ya han amenazado directivos, supervisores, el burócrata de ADP, Fernando Mazzone, y hasta la propia Secretaría de Trabajo de la Provincia, en la declaración de ilegalidad del paro de 48 horas convocado por SiTEPSa para el miércoles y jueves pasado. Las groseras irregularidades en el sumario a los 117 compañeros ya cesanteados dan cuenta de que el Gobierno no se ceñirá a un “debido proceso”, si decide aleccionar una vez más a la docencia salteña. Sáenz ha ido a fondo con la abolición del derecho a huelga, ya no sólo cuando es ejercido mediante autoconvocatorias de las bases, sino hasta cuando es llamado por sindicatos reconocidos por el propio Estado. La necesidad de la defensa del derecho a huelga sobre la base de su ejercicio colectivo y la pelea por la reincorporación de los 117 docentes ya cesanteados es más importante que nunca.

Un importante sector de huelguistas ha parado a sabiendas del carácter entreguista y progubernamental de los “autoconvocados de la plaza” y a sabiendas de las posibles sanciones que, en el caso de nuevas cesantías, dependerán de la lucha que se dé durante los meses que dure el proceso sumario. Esa desconfianza en los placeros ha llevado a este sector conformado por nuevas camadas de docentes a sostener el paro, pero sin intervenir masivamente en marchas, piquetes y asambleas, una diferencia notoria con las huelgas autoconvocadas anteriores. En los últimos días de la huelga, ese rol activo ha sido ocupado por un sector del viejo activismo autoconvocado, aunque de un modo conservador, ya que buena parte de él buscó en todo momento un compromiso imposible con los “autoconvocados de la plaza” en nombre de la “unidad”. Es necesario retomar la participación masiva de las bases impulsando la intervención de las nuevas camadas de activistas, después de 20 años de luchas autoconvocadas y por la defensa de su programa y método histórico: la exigencia de un salario mínimo igual al costo de la canasta familiar y las asambleas democráticas y masivas.

Por otro lado, después del levantamiento del paro, la crisis en las bases de los “autoconvocados de la plaza” se ha agudizado. A los sectores de Cafayate y Metán se sumaron sectores de Anta y otros departamentos. En el caso de Metán, una asamblea ha llegado a desplazar a históricos delegados placeros, mientras que Cafayate llama a explotar el paro convocado por SiTEPSa para el 8 de agosto próximo. Esta nueva edición de la autoconvocatoria docente,vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de una dirección independiente del Estado y subordinada al mandato de las bases, como también la necesidad de la separación tajante de los elementos conservadores, arribistas y proestatales, de derecha e izquierda, que han levantado la bandera apolítica, para mejor encubrir su defensa de la política antiobrera del gobierno.

Reorganicemos la lucha autoconvocada docente

Aprovechemos la vuelta a nuestros establecimientos para impulsar asambleas de balance y reorganizar la lucha autoconvocada. Los aumentos ya anunciados en los servicios públicos, más los que se van a producir bajo la devaluación en curso, replantearán rápidamente la necesidad de volver a la lucha, como también lo hará la crisis social y edilicia de la educación y el carácter insoportable del cuadro de aprietes permanentes sobre la docencia.

En lo inmediato, explotemos el paro convocado por SiTEPSa para el próximo viernes 8 para retomar la lucha, dándole un carácter activo al mismo. Sumémonos a la lucha por la reincorporación de los 117 docentes ya cesanteados y por el pleno respeto a la libre organización y al derecho a huelga. En este marco construyamos la dirección que necesitamos para triunfar.

Revista EDM