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El sábado 6 de marzo, sesionó la segunda Asamblea Provincial de Docentes Autoconvocados, que resolvió, por amplia mayoría, suspender la huelga que sostuvimos por 5 días y continuar la lucha mediante protestas públicas semanales en cada localidad, nuevas asambleas departamentales y la convocatoria a una nueva asamblea provincial para el 27 de marzo próximo.
Balance
La huelga docente autoconvocada se desarrolló en un escenario en donde el regreso a la presencialidad impulsado por Sáenz y Alberto Fernández fracasó por sus propias contradicciones. Muchas escuelas, sobre todo en el interior no llegaron a abrir por crisis de infraestructura y falta de personal. En otras, directivos y docentes impusieron el cierre de los establecimientos ante el surgimiento de casos de covid. Así, fueron pocas las escuelas que realmente abrieron y sobre ellas el paro en los departamentos del Norte (San Martín y Orán) fue importante, alcanzando los primeros días el 80%. En Metán, Cafayate y Rosario de La Frontera también se dieron porcentajes importantes, pero en capital no superó el 30% de adhesión. El plan de lucha que acompaña la suspensión de la huelga, expresa la total conciencia que tiene la docencia de lo nocivo del plan jurisdiccional del gobierno para la salud y la vida de maestros y maestras.
Un sector conocido como los “delegados de la plaza”, armó su propia asamblea y desconoció los mandatos de las regionales combativas y sus asambleas de base. Por otro lado, el gobierno de Sáenz adoptó el método Kicillof e inició una vacunación de los docentes de primaria, sobre todo en el norte, lo que está lejos de ser un plan de vacunación riguroso y de la provisión de la totalidad de las vacunas necesarias para toda la docencia.
Este cuadro fue analizado por los activistas que sostuvieron y pelearon por el paro y también la absoluta vigencia de la caracterización sobre el carácter criminal de la presencialidad y las consignas votadas: salario igual al costo de la canasta familiar, la vacunación inmediata y previa a las clases presenciales de todo el personal educativo y La exigencia del reconocimiento del covid 19 como enfermedad profesional por las ART. Se busca retomar el contacto con numerosos docentes, en especial en la ciudad capital, en base a este programa, y reevaluar la situación a fin de mes.
Una nueva fase de lucha
Esta semana el ministro de Salud de la Provincia, Juan José Esteban, declaró que volver a fase 1 implicaría la “liquidación de la sociedad”. Respondió en estos términos a la consulta por el crecimiento de casos y el límite de ocupación de camas covid en los hospitales de la provincia y el crecimiento de los casos por contagios en las escuelas. Para el ministro, la salvación de “la sociedad” significa que hay que poner en riesgo la salud y la vida de maestros y alumnos. En esta operación de rescate del capitalismo, Sáenz ha apurado la contratación de ordenanzas precarios y un limitadísimo inicio de vacunación, que no alcanza al 20% del personal educativo y que tampoco tiene la eficacia sanitaria esperada. El plan de lucha que lanza la asamblea autoconvocada de docentes salteños y que inicia esta semana con concentraciones públicas en todas las localidades, denuncia la presencialidad criminal del gobierno bajo la pandemia y la enfrenta en cada establecimiento. Estamos ante una lucha estratégica, que los autoconvocados encaran y asumen con plena conciencia de su alcance.
