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En un cuadro dramático del desarrollo de la pandemia en Tucumán, con picos de 1.000 contagios diarios, hospitales a un 80% de ocupación y en el marco de restricciones de circulación en más de 20 distritos de la provincia, el jueves 20 de mayo pusimos en pie la jornada de lucha piquetera a pata y pulmón en la capital de la provincia, de la que participaron más de 2.000 compañeros. Según los indicadores, gran parte de este crecimiento de los contagios tiene lugar en el Gran San Miguel, en las numerosas barriadas de los municipios que rodean la capital, donde se asientan los núcleos del Polo Tendencia. Muchos compañeros se han contagiado o están aislados por contacto estrechos, lo que afectó a algunas zonas y no se pudieran movilizar con todas sus fuerzas. A pesar de ello, fue una enorme movilización.
La marcha se inició en dos puntos de la ciudad, en la zona norte y este de la capital y desde allí, marchando se confluyo en la plaza Independencia, frente a casa de gobierno, donde nos mantuvimos varias horas y realizamos un acto central.
Participaron asambleas de La Cocha, Concepción, Fronterita, Mancopa, Orán, Los Lotes, Ranchillos, Los Sueldos, Viclos, Delfín Gallo, La Florida, Los Ralos, Colombres, Alderetes (varios barrios), decenas de barrios de Capital, Manantial, San José, San Javier, Las Talitas, Burruyacú, decenas de asambleas de Tafí Viejo.
Como viene ocurriendo en todas las jornadas de lucha, se produce la incorporación de nuevos núcleos, en muchos casos provenientes de otras organizaciones, en rechazo a la política de tregua con el gobierno y de hostigamiento y métodos patoteriles internos. El jornada del 20 se movilizó una camada nueva de 30 compañeros de sectores que rompieron con Darío Santillán y Barrios de Pie.
La situación social es intolerable. La presencia del Polo Tendencia en las calles, el hecho de que cada jornada haya sido cubierta en los medios, son factores que impactan y luego vienen los acercamientos.
El Polo Tendencia es una gran referencia. En varios pueblos donde se desarrolló la gran lucha de los trabajadores del citrus, sectores enteros de trabajadores del limón y sus familias que participaron de los piquetes, se están integrando al Polo Tendencia, con lo cual se multiplican las actuales fuerzas organizadas y con una fuerte presencia proletaria. Como resultado de la jornada de lucha, arrancamos al gobierno provincial el compromiso de aumento de la partida de alimentos y asistencia a comedores y merenderos, reclamo que venimos sosteniendo desde hace mucho tiempo y sobre el cual el estado siempre se las arregló para no dar respuesta. Estamos alertas. En cualquier caso, las necesidades que se desprenden del agravamiento de la pandemia y las nuevas restricciones van a tener consecuencias directa sobre el ingreso de los trabajadores que no van a poder salir a buscar su changa, o las compañeras que trabajan en el servicio doméstico. Todo esto le echa más brazas a la caldera de la crisis social y en consecuencia la necesidad de establecer y unificar los reclamos de la población trabajadora, ocupada y desocupada frente a la nueva situación en una lucha de conjunto para arrancar todos nuestros reclamos.
