Escribe Cuki M.
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En la provincia de Santa Fe podría desarrollarse una iniciativa única. Este lunes 2 de agosto se realizará un encuentro de mujeres y disidencias de la provincia que tiene por objetivo formar una red de denuncia y activismo en todo el territorio.
La convocatoria surgió de la mesa Ni Una Menos de la ciudad de Santa Fe. Es para otras mesas NUM, agrupaciones y/o personas que quieran sumarse de manera individual. Aun con límites muy concretos, la posibilidad de establecer una comunicación provincial, que permita acciones comunes, reclamos masivos y respuestas inmediatas, es una oportunidad que debe aprovecharse, para poder desarrollar el debate político y la organización de acciones.
Como se reflejó en distintas notas en Política Obrera, la mesa de la capital tiene un derrotero interesante. Se conformó como todas las mesas NUM del país en el 2015, y estaba integrada por diversos sectores, fundamentalmente partidos políticos con gran presencia del PJ/Kirchnerismo y de la burocracia sindical afín. La victoria de Macri a nivel nacional y un nuevo mandato del Frente Progresista en la provincia ese año, permitió a estos sectores protagonizar numerosas intervenciones, en un ambiente de mayor denuncia y más independencia con estos gobiernos.
Este proceso intentó ser boicoteado desde el 2019 y las elecciones. Hubo un vaciamiento del organismo por parte del PJ/Kirchnerismo y una intención manifiesta de neutralizar el espacio. Tanto los sectores partidarios como las cúpulas sindicales afines a Fernández y Perotti, han hecho un trabajo de desarticulación y descrédito del organismo, sumado a que muchas de quienes participaban son ahora funcionarias.
Esto se verificó en todo el país, con el planchazo después del debate parlamentario por la IVE en el 2018 y el proceso electoral en 2019. Santa Fe no fue la excepción. Pero el trabajo que se había conformado, persistió, a pesar de los ataques e intentos de desarticulación. El 8M del 2020 fue un momento clave: un documento de denuncia política y de reclamos sindicales fue leído en el acto, lo que produjo que el MOS (Movimiento Obrero Santafesino, que nuclea las dirigencias peronistas y kirchneristas) se negara a firmar por diferencias políticas. Lo mismo pasó el 25N, en plena pandemia, con un escrito contundente de independencia política y de reclamo, que incluyó una batería de demandas en el marco de la emergencia sanitaria.
Este 8M de 2021, estalló la crisis en el organismo. Se trató, fundamentalmente, de qué posiciones políticas tenía el organismo y por qué se priorizaba la defensa de los gobiernos y no del movimiento de mujeres. A raíz de esta situación, se propuso realizar debates, definir un posicionamiento político y ampliar la convocatoria. En este proceso surgió la iniciativa de convocar un encuentro provincial, que permita tender puentes y conformar una red en distintas localidades.
Esta reunión se realizará en la provincia que presenta una de las situaciones más críticas de todo el país. La falta de cobertura médica, el nivel de subocupación y la pobreza infantil, son los principales flagelos para los santafesinos en la actualidad.
El nivel de personas que sólo acceden a la salud pública creció tanto en el gran Rosario como en el gran Santa Fe. Esto va de la mano con el aumento del desempleo que subió al 13,6 y 7,8 %; y la suba de la subocupación que pasó del 9,6% al 12,2%; y del 9,8 al 12%.
Esta situación afecta notablemente a mujeres y disidencias, más aún en contexto de pandemia, siendo que integran mayoritariamente los sectores que están en la primera línea como salud, la docencia, entre otros. A su vez, el 70 por ciento de los precarizados del Estado que heredó y mantiene Perotti son mujeres, sin derecho siquiera a la maternidad.
En el territorio, aumentaron más de un 5 por ciento las llamadas por violencia de género a la línea 144. A la par de esta situación tanto la ciudad de Santa Fe como Rosario precarizan a trabajadoras que atienden los teléfonos, teniendo turnos de más de 12 horas para atender denuncias de importancia como violencia o desapariciones.
Otro flagelo es la limitación al acceso a la IVE. En la “provincia modelo” han pasado gobiernos peronistas, socialistas y radicales, pero no se dio solución a ninguno de los problemas básicos de la salud sexual y reproductiva. Incluso han empeorado, llegando a límites extremos de violencia obstétrica y denuncia de familias por muertes de madres y bebes, como en el norte provincial. Esto en el marco de un preocupante aumento de los embarazos de niñas, abusos intrafamiliares y prostitución infanto-juvenil. La situación del centro de la provincia es similar: faltan anticonceptivos, hay ataques a los equipos que garantizan derechos, la imposibilidad de garantizar abortos quirúrgicos y la posterior derivación a Rosario, ambas zonas colapsadas por los casos de COVID que no dejan de aumentar. La conclusión es clara: estos gobiernos no dejan abortar ni tampoco ser madres.
En los últimos días se replicaron denuncias y estallaron diversos casos de abuso sexual a menores. El epicentro fue en Rincón, pequeña localidad pegada a la capital provincial, pero ya tuvo eco en Santa Fe y Rafaela. Se dieron movilizaciones y cortes de calles en las distintas localidades. Esto sólo muestra que la situación no hizo más que empeorar, más allá de la cantidad de funcionarias u organismos de género que el ejecutivo intenta mostrar.
El discurso del Gobierno provincial y del flamante Ministerio de Estado, Igualdad y Género, está escindido completamente de la realidad del territorio. No sólo porque son los ejecutores de despidos, precarización y explotación de mujeres trabajadoras, sino también porque son los responsables de la miseria, el hambre y la violencia que castiga a cada vez más personas.
Desde el Plenario de Trabajadoras Tendencia tenemos una participación activa en la mesa NUM de Santa Fe y formamos parte de la organización de este encuentro. Realizamos dos plenarios con compañeras de Rosario, el Cordón Industrial, la capital y Reconquista, para definir una orientación e intervenir con un programa que abarque los principales aspectos de la situación actual: la pandemia, el hambre, el trabajo y la necesidad de organizarnos ante las nuevas medidas anti obreras que desplegarán después de las elecciones a nivel nacional y provincial.
Este encuentro, con los límites de una orientación feminista muy diversa y con la participación de diferentes sectores, abre una posibilidad de organización y lucha común que tenemos que profundizar y replicar en todas las localidades de la provincia. La necesidad de autoconvocarse y organizarse es fundamental en este contexto, por lo que el próximo 2 de agosto en la primera reunión, propondremos que esta red sea independiente de los gobiernos y del Estado, que se convierta en una referencia de lucha en todo el territorio y encuentros y resoluciones provinciales.