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La última semana se ha visto atravesada por las huelgas y movilizaciones de distintos sectores del movimiento obrero en todo el país. Las luchas, que se encuentran en ascenso, reflejan que el calendario electoral se asienta sobre un terreno convulsivo. Desde Chubut, con la huelga de trabajadores de la salud que tomaron del ministerio de salud provincial y con la huelga docente que contó con una importante movilización, hasta la huelga de docentes autoconvocados en Salta, pasando por el corte de los trabajadores de EMA en el Puente Pueyrredón. A eso se le suman las movilizaciones de los desocupados, que salieron a las calles casi todos los días tanto en CABA y en las provincias del interior.
La otra nota destacada de la semana fue el giro represivo del gobierno frente al ascenso de las luchas. En el Puente Pueyrredón los cortes de EMA fueron recibidos con destacamentos policiales de infantería que impidieron a los trabajadores subir al puente para realizar su protesta. El acampe y las movilizaciones docentes de Salta fueron respondidos con una brutal represión que incluyó disparos al aire con armas de fuego. El martes 17 los desocupados organizados en la Tupac Amaru fueron reprimidos en el Puente Pueyrredón con gas pimienta, palazos y balas de goma. A esto se suma la campaña macartista contra las organizaciones de desocupados y la ofensiva judicial contra algunas de ellas.
Los trabajadores debemos tomar nota del recrudecimiento de la política represiva del gobierno nacional y de los gobiernos provinciales. Se trata de una política consecuente con el acuerdo con el FMI que se prepara para después de las elecciones, que implica un ajuste a los trabajadores, mayor del que pueden soportar. Es lo que explica también los recortes e incumplimientos del Ministerio de Desarrollo Social con las organizaciones sociales, que quebró los compromisos que asumieron frente a las crecientes protestas de los desocupados.
En este contexto, el Polo Obrero Tendencia se movilizó a las puertas de Desarrollo Social en CABA, con compañeros de Capital y del conurbano, y a las distintas dependencias provinciales en el interior. Reclamamos por los recortes y los incumplimientos, así como repudiamos el ataque a las organizaciones de desocupados. Más de 10.000 compañeros y compañeras se movilizaron en todo el país, en Salta, Jujuy, Mendoza, San Juan, El Dorado, Entre Ríos, Santiago del Estero, Tucumán, Pergamino, Bahía Blanca y otras regiones.
El recibimiento del gobierno en el Ministerio de CABA fue con un despliegue de infantería apostados en la 9 de Julio, rodeando nuestra columna, para impedir que nuestra movilización llegue a las puertas del ministerio. Ante el aviso de que llevaríamos a cabo un acampe en caso de no responder a nuestras demandas, los funcionarios del gobierno respondieron con la amenaza de que se desataría una represión en caso de acampar. Accedieron a un conjunto de reclamos en relación a los compromisos pendientes pero se negaron a hacerlo público.
Los distintos cuerpos de delegados se reunieron en la 9 de Julio para debatir la situación y votar una decisión. La resolución que se tomó fue levantar la medida con los compromisos asumidos del pago a todos los compañeros pendientes, tanto a los de nuestra organización como a los de todas las que se encontraban en la misma situación, pero convocar a cortes de accesos en todo el país para el siguiente viernes en caso de no encontrarnos con los depósitos correspondientes realizados.
En el día de hoy han comenzado a acreditarse los pagos a una cantidad importante de compañeros. Estamos atentos al cobro de la totalidad de los compañeros adeudados, así como estamos en contacto con otras organizaciones sobre su situación con los cobros. Nos encontramos en principio ante un triunfo de la lucha de los desocupados. Este triunfo debe servirnos para enfrentar los tiempos que se vienen, a los cuales el gobierno y la mayoría de la oposición van a tratar de imprimirle el sello del ajuste del FMI. Desde el Polo Obrero Tendencia nos preparamos para dar la batalla por derrotar el ajuste presente y futuro y porque el triunfo de todas las luchas obreras abran una perspectiva de salida de los trabajadores.
