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Durante la mañana de este lunes, cien trabajadores de Mondelez Pacheco realizaron un corte de la Avenida Henry Ford, primero, y luego del Ramal Escobar de la Autopista Panamericana, como respuesta al despido de los trabajadores eventuales, a quienes se les impidió el ingreso primero en el turno noche del domingo y en la primera hora del lunes, cuando ingresaba el turno mañana. El 30 de octubre se vence otra tanda de contratos, por lo que 150 trabajadores más quedarán en la calle. Luego del piquete, los despedidos montaron una guardia en el portón de planta, en reclamo de su reincorporación.
El sábado 2 de octubre vencían los contratos de los 310 contratados a plazo fijo, que venían renovándose periódicamente. Esta modalidad, como explicamos en otros artículos, permite a las patronales extender el período de prueba del trabajador de 6 meses a 5 años, sin costos indemnizatorios para el empleador. “La empresa quiere actuar con absoluta libertad a la hora de contratar y a la hora de despedir trabajadores, lo que se llama en la jerga laboral, una intensa rotación de personal. Esto significa acentuar la vulnerabilidad del puesto de trabajo. Esto que hace Mondelez lo hace toda la patronal argentina, en la grande y pequeña industria. Despidos a capricho de la patronal.” (Altamira en Mondelez, 11/8)
Estos contratos se hicieron, según la patronal, para cubrir a los trabajadores de riesgo licenciados por la pandemia, para cubrir a las madres con hijos también licenciadas por el parate escolar y para cubrir las licencias de los trabajadores con síntomas y sus contactos estrechos. Al retornar la mayoría de los licenciados por la pandemia, en Mondelez como en todas las demás plantas, se procede a despedir a los que más se expusieron a la pandemia en beneficio de la patronal. La nueva normalidad empieza con el despido de miles de contratados en todas las fábricas del país.
El viernes pasado se había realizado una asamblea de planta, por lo que el Ministerio de Trabajo dictó la Conciliación Obligatoria, que como se ve, solo sirve para darle argumentos Sindicato para no poder parar, porque para que la patronal se prive de despedir es evidente que no sirve. Según Jorge Penayo -secretario general de la Comisión Interna-, “la posición de la interna es que esos contratos se podían extender hasta por lo menos fines de diciembre, aprovechando que hay trabajadores que están de vacaciones, y de esa manera poder ver en qué puestos hay vacantes para que esos chicos puedan quedar efectivos porque entendemos que los puestos de trabajo están. Ante la posición cerrada de la empresa el conflicto lo va a tener que resolver el Ministerio de Trabajo porque hay dos posiciones encontradas. La discusión con la fábrica se da en un momento complejo, está jugando en política la patronal, porque toda esta bronca que van generando es porque quieren que vuelva el sector reaccionario del macrismo, por eso el 14 de noviembre tenemos que jugar con todo contra este sector. Lo que pedimos al gremio es que, si mañana no se resuelve el conflicto, tienen que llamar a un paro nacional de toda la alimentación para torcerle el brazo” (declaraciones en Radio Arraigo).
El STIA y la Comisión Interna, que suelen realizar conjuntamente bloqueos de portones, no pretenden llevar adelante ningún proceso de lucha real. El STIA le reclama a la interna que pare la planta. La Comisión Interna le reclama al Sindicato un paro nacional. El conflicto de los despedidos -que en Mondelez fue motivo una gran huelga en el 2009-, pretende ser utilizado como rehén de la disputa entre el STIA y la interna de la fábrica, que se pasan la pelota mutuamente. Un paro de la planta más grande del gremio de todo el país es un buen paso para reclamarle al STIA la huelga general.
El reclamo de la Bordó de una asamblea general para discutir cómo seguir el conflicto, es correcto. Los trabajadores de adentro y de afuera tienen que tomar en sus manos la lucha, como en el 2009. Es correcto a pesar de que la Bordó no convocó prácticamente asambleas generales – durante sus 8 años de mandato se realizaban asambleas en el comedor, con la planta funcionando, sin paros internos.
El Ministerio de Trabajo, bombero de la patronal, adelantó la audiencia que estaba convocada para el miércoles próximo -siempre con los despedidos afuera- para hoy martes a mediodía. El piquete del lunes fue solo el primer capítulo de la lucha contra los 310 despidos en Mondelez.
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