Asamblea en Parque Lezama llama a manifestar el sábado 11 contra el acuerdo con el FMI

Escribe Jacyn

Se reflejaron diversas posiciones políticas.

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Una docena de organizaciones participaron de la reunión convocada por el FITU, en Parque Lezama, para organizar una marcha contra el acuerdo con el FMI, el viernes11 de diciembre próximo.

Hubo unas 30 intervenciones, de las cuales los partidos del FITU, incluido Convergencia Socialista, acapararon aproximadamente la mitad de los oradores entre los ocho legisladores y ex candidatos, que también presidían la mesa. Las presencias de organizaciones obreras fueron escasas. El SUTNA no participó ni fue mencionado desde la mesa que coordinaba la reunión. Hicieron uso de la palabra César Arakaki, condenado en primera instancia por su participación en la lucha contra la ‘reforma previsional’ de Macri, en 2017, y representantes de la comisión contra la extradición de Facundo Molares a Colombia. Otras organizaciones que participaron fueron Marabunta, Opinión Socialista, el MULCS, el MTR de Roberto Martino, el PRML y los Economistas de Izquierda.

Hubo coincidencia en marchar el 11. Algunas agrupaciones -CS, Nuevo MAS, PCT, entre otros- propusieron darle continuidad a esta modalidad de reunión. Hubo propuestas para “ampliar” la convocatoria. Silvia Saravia, de Barrios de Pie, se refirió a la CTA, la que “a pesar de que estuvo en Plaza de Mayo en el acto de apoyo a Alberto Fernández, tiene un posicionamiento contra el pago de la deuda”. En el reciente congreso de SUTEBA, el PTS le propuso a Baradel sumarse a la marcha. En nuestra intervención, planteamos que “Política Obrera se movilizará contra un acuerdo con el FMI y contra las políticas de ajuste, bajo las consignas Congreso Obrero y Huelga General”.

Los dirigentes del FITU coincidieron en formar “un polo contra el ajuste”, “un movimiento contra el pago de la deuda” y fórmulas similares. Estos planteos apuntan a desarrollar una coalición de fuerzas en términos superestructurales, lo cual supone alguna forma de integración pluriclasista, la que se reforzaría con el argumento de que la lucha contra un acuerdo con el FMI es “nacional”, que atraviesa ‘horizontalmente’ a las clases medias. Este enfoque se reflejó en el debate acerca de la ‘correlación de fuerzas’, cuando voceros del PTS llamaron a la ‘izquierda’ kirchnerista a modificarla en común. En contraste con este planteo, desde Política Obrera subrayamos la importancia de la agitación política como instrumento para lograr una participación decisiva de las masas en esta lucha. Después de todo, la posibilidad de derrotar al Fondo depende del sacudón que estos acuerdos en marcha, provoquen en los trabajadores.

Como conclusión de la reunión, los convocantes propusieron las consignas “Todxs a la Plaza contra el Fondo. No al pacto con el FMI y el pago de la deuda. Abajo el plan plurianual y el ajuste, no a la reforma laboral. Por un plan de lucha nacional contra el acuerdo”, que dieron por aprobadas. Se prevé redactar un documento que concilie las posiciones de los organizadores, que se leerá al concluir la marcha y resolver cuestiones de organización, en reuniones a precisar. La cita de la movilización se fijó para las 15:30 en Av. De Mayo y 9 de Julio.

Las consignas aprobadas, un ´plan de lucha´, por ejemplo, son confusas, porque no establece quién convocará a esa lucha, salvo que se refiera a la dirección de la CGT, como ha sido habitual en el pasado. Es claro que por aquí se marcha a un impasse, porque la CGT se encuentra a la cabeza del reclamo de un rápido acuerdo con el FMI. Por eso, propusimos, de nuestra parte, el impulso a coordinadoras de organizaciones de base y un Congreso Obrero que no tiene futuro si no está dirigido a preparar la huelga general por medio de coordinadoras y congresos obreros.

Del Caño, en su intervención, fue enfático en llamar a los sindicatos a que “rompan esa subordinación con el gobierno, convoquen a asambleas y discutan un verdadero plan de lucha de todo el movimiento obrero” y a que se sumen a la movilización del 11. Suena aventurado suponer que los sindicatos, o sea sus direcciones, que han ido a la rastra de los Fernández y ahora ocupan el centro del escenario a favor del FMI, rompan con el gobierno de aquí a fin de año. Lo que sí cabe esperar es que, si como ocurrió en otras ocasiones, se desencadena una huelga general, la burocracia de los sindicatos sea invitada por las patronales a pegar un giro a la izquierda para frenar el movimiento.

La asamblea, en el anfiteatro del Parque Lezama, esbozó con claridad las posiciones políticas en juego. Es algo positivo, porque serán sometidas a la experiencia de la lucha.

Política Obrera se movilizará el 11 de diciembre contra el nuevo pacto colonial bajo las consignas Congreso Obrero, Huelga General.

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