Escribe Cuki M.
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A pesar de las dificultades de un nuevo año de pandemia, con todo lo que ello implicó -e implica- este 2021 se formó el Polo Obrero Tendencia en Santa Fe capital. La última experiencia del frente había comenzado en el 2003, al calor de la inundación en la ciudad y se disolvió algunos años después, aunque marcó al grupo de compañeros que en ese momento fundaban y consolidaban la regional del Partido Obrero en la localidad.
Muchos fueron los factores y las dificultades que impidieron la continuidad del Polo en la ciudad. Pero este año se logró, a partir de una resolución votada en un plenario local y una orientación discutida por todos los compañeros.
Es necesario destacar que la formación del Polo Tendencia en Santa Fe está ligada a tres hechos muy importantes: uno, es la expulsión de más de 1.200 militantes por el aparato que en 2019 se hizo con el Partido Obrero. La regional de Santa Fe en su totalidad rechazó las intimidaciones en los debates pre congresales, dio una batalla enorme ante el ataque sufrido en el propio comité provincial e incluso fue intervenida, pero ninguna maniobra tumbó la voluntad política de los compañeros y compañeras, que votaron unánimemente incorporarse a la Tendencia.
El otro aspecto, relacionado al anterior, es que el Polo santafesino surgió a partir de una actividad de legalidad, en el marco de una campaña que, aun en pandemia, se desarrolló para obtener la personería jurídica perdida en 2019.
Estos antecedentes marcan a fuego la experiencia realizada desde abril hasta diciembre en los barrios Los Troncos y Santo Domingo, y desde hace un tiempo en barrio Yapeyú. Los vecinos que comenzaron a discutir con nosotros conocen estos procesos ya que fueron explicados desde un principio e incluidos en los debates políticos. Pero, sobre todo, fueron comprendidos en la práctica concreta y en su relación con otras organizaciones de desocupados de la ciudad.
En tercer lugar, el Polo creció al calor de la propia crisis. El Gran Santa Fe es el tercer conglomerado más pobre del país, según las últimas estadísticas del INDEC. Hay un 50,5% de pobres con 271.560 personas por debajo de la línea de pobreza de un total de 537.959 santafesinos. La cifra está casi 10 puntos por encima de la media nacional y representa más de la mitad de la población total del conglomerado santafesino. Los barrios del noroeste de la ciudad no tienen agua potable, uno de los principales reclamos en cada movilización, ni tampoco luz o accesos.
En este contexto, el comienzo fue difícil. No sólo porque teníamos que llegar al barrio y traccionar a los vecinos, sino también porque fue la primera experiencia para muchos compañeros militantes de la regional. A costa de recorrer las calles y golpear las puertas, se pudo consolidar un grupo que sostuvo la olla todos los sábados y que permitió motorizar los debates y los encuentros. El darle de comer a los vecinos fue, en este caso, el principal factor de agrupamiento.
En los últimos meses la actividad del frente dio un vuelco y creció rápidamente. Comenzó con la primera movilización a Desarrollo Social de la provincia y la primera conquista de módulos y ayuda económica. La lucha por el cumplimiento de los compromisos sigue vigente y se reforzó con una movilización a principios del mes, en la que obtuvimos un primer depósito fundamental para el sostenimiento de la olla, y que se dio en sintonía con la jornada nacional.
Estos beneficios conseguidos con la lucha, a los que se suman los planes obtenidos por el Polo Tendencia a nivel nacional, significaron mayor presencia de los compañeros, mejores debates en asambleas más numerosas y la posibilidad de organizar tanto actividades financieras como de socialización. Olla para 350 personas, mate bingo, rifas, charlas y ventas, entre otras actividades, fueron sostenidas por los vecinos y vecinas, en sintonía con las campañas de Política Obrera.
Otro aspecto fundamental de este proceso es que el Polo Obrero Tendencia comenzó a tener presencia en las calles de Santa Fe, participando de marchas políticas claves en la ciudad como el 25N, que fue preparado con las vecinas, la Marcha de la Gorra y el 20 de diciembre. Un capítulo especial fue la marcha contra el FMI convocada por el FIT-U, que fue una experiencia política muy importante por varios motivos, pero, sobre todo, por la actitud de los partidos del frente al querer censurar a las organizaciones presentes en la plaza. Esto ameritó un punto en el temario de la asamblea siguiente, en el que se debatieron no sólo los aspectos políticos del documento, sino también las maniobras y actitudes patoteras que tuvieron.
El desafío que tenemos por delante es avanzar políticamente y, como siempre repetimos en los encuentros, ganar a los vecinos y vecinas a la organización y a la militancia del frente y el partido. Ya tenemos buenos cimientos para encarar nuevas campañas en la regional, con un pre círculo funcionando y tareas fundamentales, como la puesta en pie de la legalidad provincial.