El Encuentro Memoria, Verdad y Justicia desbordó por lejos la plaza

Tiempo de lectura: 1 minuto

La disputa oficial y la marcha camporista capturaron la atención de la jornada del 24, a expensas, principalmente, de la convocatoria del EMVyJ. Hubo una diferenciación organizativa y de espacios con el camporismo, pero no una diferenciación política. Después de todo, la cuestión esencial para los trabajadores no es la posición política de Guzmán o AF, sino del cristinismo, que pretende disputar la alternativa política a las expresiones de clase y socialistas. En el cierre del acto se leyó un “documento único”, que no denuncia la maniobra confusionista y gatopardista de la Cámpora, ni plantea un plan de lucha para hacer frente al derrumbe hiperinflacionario del gobierno. Como consecuencia de la guerra imperialista en Europa (que se ramifica a Asia), el acuerdo con el FMI alinea a Argentina con la Otan. Esto no solamente tiene consecuencias sociales enormes, pues ha convertido en terreno de guerra al Atlántico Sur, con el rearme de Malvinas y el veto de la Otan a la instalación de puertos que sirvan al comercio con China, cuyos pesqueros pululan la zona. En una Plaza de Mayo colmada de militantes, activistas y un caudal numeroso de organizaciones piqueteras, quedó en evidencia el eco que produce una convocatoria independiente del Estado, en contraste con una perspectiva política que raya en la nada.

MR

Suscribite a Política Obrera