Colonia Santa Rosa: la campaña por el derecho a la vivienda y la urbanización de los asentamientos avanza

Escribe Violeta Gil

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Los vecinos de Colonia se organizan para arrancarle al municipio y a la provincia, los recursos necesarios para imponer una agenda propia, mediante asambleas barriales donde se elaboran pliegos reivindicativos en los que los vecinos enumeran las obras necesarias en cada caso y la votación de cuerpos de delegados por barrio.

A la cabeza de todo el proceso de deliberación entre los trabajadores se encuentra el asentamiento Las Palmeras, en donde una asamblea de vecinos acaba de votar a la compañera Claudia Alvarez, de Política Obrera, como "presidenta" de la Junta Vecinal, un viejo organismo dirigido por punteros políticos vinculados siempre al intendente de turno que condicionarlos cualquier obra en el barrio, a los recursos limitados que los propios vecinos podían reunir en lotas o acciones vecinales.

Este nuevo cuerpo de delgados integrado por la compañera Claudia y otros vecinos, entre ellos, compañeros del Polo Obrero T, tiene como tarea el desarrollo de nuevas asambleas, donde se ratifique y amplíe el pliego de reivindicaciones histórico de Las Palmeras, por cloacas, requipamiento y refacción de la salita, iluminación, apertura de calles, tendido de red eléctrica, construcción de un puente de acceso y titularización de los lotes.

Las Palmeras es para los trabajadores de Colonia y en particular para los compañeros del Polo Obrero T y de Política Obrera, una causa propia. Allí se produjeron cuatro incendios de casillas en el último año. Uno de ellos con consecuencias catastróficas para nuestra compañera Yolanda Vargas porque en el incendio de su casilla, el 9 de febrero de 2021, murieron sus dos hijos, Thiago y Melanie. Hace un año y un mes enfrentamos a todo el aparato de la justicia que pretende responsabilizar a Yolanda por la muerte de sus hijos y eximir de sus responsabilidades a funcionarios municipales y provinciales por arrojar a las familias y en particular a las trabajadoras y sus hijos a vivir en condiciones de extrema precariedad en las barriadas.

La lucha por la urbanización en Las Palmeras y en toda la Colonia será una causa propia de la clase obrera.

La agenda de asambleas prosigue por el asentamiento Sagrado Corazón, el más grande en cantidad de habitantes en el municipio, en donde además los vecinos nos proponen desenvolver reuniones.

En todos los casos, las recorridas y las asambleas son acompañadas por el compañero Omar "choco" Ramírez, concejal del PO en Colonia. En las asambleas, el compañero presenta el proyecto de ordenanza presentado en el Concejo, por la urbanización integral de las barriadas y asentamientos, que es el resultado de la lucha que los propios vecinos vienen desarrollando desde hace muchos años. Esta iniciativa, ahora también en el Concejo Deliberante de Colonia sólo podrá prosperar en términos legislativos, y sobre todo, en términos prácticos, sobre la base de una poderosa organización de los vecinos en cada barriada.

Los trabajadores de Colonia no están dispuestos a seguir sacrificando sus condiciones de vida y la de sus familias.

Ante un cuadro de ataques mayores sobre los explotados por parte del conjunto del régimen político que celebra un acuerdo con el FMI que tendrá como propósito hundir aún más a la clase obrera en la miseria, desocupación y hambre, los trabajadores de Colonia nos preparamos para disputar los recursos provinciales y ponerlo al servicio de las necesidades de los trabajadores, al servicio de esta causa actúa la bancada del PO en Colonia.

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