Transporte: lock out, despidos, salarios

Escribe Matías Cisneros

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Las empresas anunciaron la medida de fuerza de 22 hs. del miércoles a 6 horas del jueves. El reclamo es por "las grandes demoras que se producen en el pago de las compensaciones tarifarias". Denuncian que esta tardanza "está imposibilitando la operación normal de los servicios", provocando que no puedan "brindar la totalidad de servicios durante toda la jornada".

Las patronales venían aplicando descuentos arbitrarios y pagando los salarios con retraso. En Necochea llegaron a pagar 50% del sueldo, en Formosa también hubo problemas de cobro; un paro de 5 días en las lanchas colectivo del Tigre fue provocado por retrasos salariales, incluso la especulación del gasoil en Córdoba tuvo afectado el transporte de productos agrícolas. El lock out en AMBA se enmarca en un reclamo patronal de las empresas de transporte de pasajeros y comercial, surcado por una presión de suba tarifaria o subsidios, leña al fuego inflacionario y el recorte fiscal del Gobierno para los pagos al FMI.

Los efectos de la guerra en Ucrania llevan a la suba del combustible y esto ha detonado paros en el transporte en Perú, Honduras, Brasil y ahora Paraguay.

La cuestión de subsidios al transporte ha sido denunciada por los trabajadores del colectivo. En los cortes impulsados por la línea 60 y las líneas del oeste, colocaban el reclamo salarial y denunciaban la pretensión patronal por mayores subsidios. A esto se suma la descarga de las patronales de la crisis en los trabajadores. Despidos y sanciones arbitrarias, falta de pagos a los que se encuentran bajo carpeta médica, se suman a los retrasos de cobros salariales.

A su vez, las patronales retienen el parque automotor y flexibilizan las jornadas laborales con pagos de vueltas en negro. Misión Buenos Aires, empresa que se quedó con el recorrido del grupo Plaza Retiro-La Plata, paga $800 por vuelta adicional y $2.000 por las dos vueltas. Se aprovecha de los bajos salarios del gremio, que rozan la línea de pobreza.

La medida de lock out patronal se aprovecha de la parálisis de los sindicatos. En UTA, dividida en fracciones Fernández (UGATT) y Bustinduy (CATT), la iniciativa está en los cuerpos de delegados y activistas. Es necesario un congreso de bases para romper la traba de las conducciones sindicales, entregadas a la política patronal y las medidas de ajuste económico del FMI. Por las reivindicaciones obreras, necesitamos organizar y coordinar las bases de lucha.

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