Salud CABA: no al cierre de las concurrencias

En las últimas semanas desde los Comité de Docencia e Investigación (Codei) de distintos hospitales se ha informado al personal, nuevamente, del cierre definitivo por parte del gobierno de la Ciudad para el próximo año del sistema de formación de postgrado –las concurrencias. Esto no sólo dejaría a los egresados de la Facultad con menor posibilidad de ingresar al ámbito hospitalario, sino que sería un vaciamiento de 1.500 profesionales en áreas médicas, psicología, trabajo social, entre otras, que se encuentran supliendo la falta de personal de planta.

No es la primera vez que se hace circular esta noticia. Desde la gran marcha de residentes, concurrentes y personal de planta en 2019, en contra del reglamento de residentes propuesto por Larreta, los concurrentes venían exigiendo salario y una cobertura de ART.

Durante la pandemia y frente al reclamo del personal concurrente por una cobertura de ART y frente al Covid como el que dispuso todo el personal de salud, el gobierno de la Ciudad optó por la recomendación de cortar las prácticas formativas afectando no solo el desarrollo profesional de los egresados sino también resintiendo la estructura sanitaria de muchos hospitales. Fue el punto de inicio para un progresivo ataque al sistema de concurrencias que, a pesar de realizar la labor de personal estable, no cobra ningún tipo de estímulo económico.

La concurrencia es una formación de cinco años de posgrado no arancelada. El profesional forma parte del equipo de planta. Además de la atención clínica, su formación se complementa con talleres de lectura, seminarios y espacios de supervisión. Con el cierre, el gobierno de la Ciudad pretende transformarlas en posgrados pagos de dos años en la Facultad. Una degradación de la formación en servicio. Los capitalistas, de un problema hacen un negocio, a costa de la mercantilización del conocimiento, la educación y la salud pública del país.

En resistencia a esto, los concurrentes junto a personal de planta se han movilizado durante estos dos años para manifestar su enérgico rechazo a esta medida reaccionaria. Cuenta además, con el aval del gobierno universitario como así también -de hecho- de las direcciones gremiales de Médicos Municipales y Federación de Profesionales que no han acompañado más que con declaraciones escritas este rechazo. Estos gremios no solo han renunciado a la lucha por la paritaria impuesta por Larreta, sino que el cierre de las concurrencias agravará el vaciamiento de personal de planta y profundizará la precarización.

La manera de defender las concurrencias, la formación profesional, los derechos laborales, el salario y una educación y salud pública para las y los trabajadores, es mediante la organización en asambleas para retomar el plan de lucha abandonado por las conducciones gremiales, con la huelga indefinida de todo el personal de salud. Que la pandemia sirva para organizarnos para mejorar el sistema de salud, y no para desarrollar las ganancias de la empresa privada y los gobiernos capitalistas. Este 12, las concurrencias como todo el equipo de salud y educativo, a las calles en una única marcha blanca de la salud en el día de enfermería, para defender los puestos de trabajo, el salario y la salud pública.