Escribe Pablo Busch
La clase obrera europea en el escenario de la guerra mundial.
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Las centrales sindicales de Grecia han convocado a un paro de 24 horas en reclamo de aumento de salarios y otras medidas la escalada contra la de precios, especialmente de la energía. La huelga ha afectado, sobre todo, al transporte, las escuelas y la administración.
En Grecia, el cimbronazo inflacionario se desata sobre el empobrecimiento general instalado desde los paquetes de austeridad instaurados por la “troika” FMI-UE-BCE de hace más de una década. Rusia provee gran parte del gas que se consume en el país; lo mismo ocurre con la harina, que Grecia también importa en gran proporción desde Rusia y Ucrania.
Los diarios describen que el cumplimiento de la medida paralizó prácticamente a todo el país: durante la mañana de este miércoles no hubo en Atenas subte ni autobús y desde el puerto del Pireo no ha salido ningún barco. Los periodistas tampoco han acudido a sus puestos de trabajo, excepto para difundir la huelga, a la que también se han sumado los controladores aéreos.
En el centro de la capital, una movilización masiva se llevaba adelante contra el gobierno de Kyriakos Mitsotakis. Diversos altercados se produjeron en la plaza Syntagma de Atenas, por los que al menos diez personas fueron detenidas.
Los griegos pagan uno de los IVA más altos de Europa con un tipo general del 24%. Según un reciente informe del Instituto Laboral de la Confederación General de Trabajadores Griegos (INE/GSEE), la combinación de subidas de precios y rentas muy bajas ha llevado a una pérdida del poder adquisitivo de los hogares con ingresos bajos hasta en un 40 por ciento.
El gobierno viene aplicando una serie de medidas para contener los precios: subsidios a las tarifas de luz, o la aplicación de un "Precios Cuidados" a la griega, llamado "la canasta del hogar",. El salario mínimo ha subido a magros 713 euros.
La huelga griega coincide con una huelga también en Bélgica, donde los trabajadores piden que se ponga un tope al precio de la energía y se garantice la negociación de los salarios para no perjudicar el poder adquisitivo.
De acuerdo a la crónica de Euronews: "Solo una línea de metro ha quedado operativa en Bruselas donde el 55% de los vuelos han sido cancelados. El aeropuerto de Charleroi ha cerrado por completo. También los hospitales se han sumado a la huelga y solo las urgencias funcionan con normalidad. *La red de autobuses de la región de Valonia (sur) se ha visto muy afectada, con la práctica totalidad de las líneas detenidas, mientras que la de Flandes (norte) funciona al 55 %, apuntó el diario Le Soir. Los ferrocarriles también han iniciado paros de 24 horas y solo circula, aproximadamente, un tren de cada cuatro. No obstante, la mayoría de los itinerarios en hora punta ha sido cancelada."