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El gobierno incumple la revisión salarial y prepara -con la burocracia- una nueva paritaria fraudulenta.
En diciembre del año pasado, el gobierno acordó con la burocracia de Conadu y Fedun, cuatro indexaciones salariales miserables hasta el final de la paritaria 2022. Se comprometieron, además, a revisar la marcha de la inflación en febrero. Pero pasó febrero y la inflación sepultó las ´cuotitas´ pactadas.
El gobierno y la burocracia no convocan a la revisión porque están tejiendo la paritaria 2023 a espaldas de los docentes. Lo dejó claro la presencia de De Feo en la paritaria nacional de CTERA, de la que no es partícipe oficial.
La directiva de Conadu Histórica, a finales del año pasado, anunció que peligraba el inicio de clases, pero no organizó nada para materializar el no inicio. Ahora, convoca un congreso tardío, esl viernes 10, cuando ya han empezado las clases los otros niveles educativos y unos días antes del inicio de la mayoría de las escuelas preuniversitarias. La lucha solipsista ha demostrado ser un camino de derrota.
La declaración de su última Mesa Ejecutiva, publicada el 2 de marzo, no dice una palabra del no inicio, ni del reclamo que venía agitando de un bono equivalente a un sueldo entero (que es más o menos la suma de lo que se ha perdido el año pasado).
Vuelve también a la consigna (fracasada) de no perder con la inflación, cuando lo que debería hacer es convocar a la docencia a una lucha histórica por una recuperación salarial que, para empezar a ser tal, debería partir del 100% de aumento inmediato.
Claro que para eso debería romper con el gobierno del FDT, pero su conducción, el PCR y los Verdes, están buscando medrar en la deriva del gobierno con algunos cargos en las listas.
Desde Política Obrera, llamamos a la docencia de todas las universidades a debatir una estrategia para la etapa que está abierta: vincular nuestras luchas particulares con la tendencia creciente a una rebelión popular. Las luchas docentes autoconvocadas en varias provincias contra el acuerdo macro de de CTERA/Conadu y el gobierno marcan un camino a seguir.
