Tucumán: condena a policías por el asesinato de Luis Espinoza

Escribe Alejandra del Castillo

Tiempo de lectura: 2 minutos

El 28 de marzo, luego de cuatro meses de audiencia, se dictó sentencia en el juicio por el asesinato de Luis Espinoza y la privación abusiva de la libertad y lesiones a Juan Espinoza por parte de la policía. Se arrancaron cuatro perpetuas y penas menores para los partícipes secundarios. Hubo dos absoluciones que beneficiaron a los civiles involucrados. En las puertas de Tribunales, familiares de víctimas del gatillo fácil y organizaciones sociales y políticas acompañamos a los familiares y exigimos justicia.

Los hermanos Espinoza se encontraron en mayo de 2020, en plena pandemia, con un operativo represivo en la localidad de Melcho, departamento de Simoca, que supuestamente era para dispersar una carrera ilegal de caballos. Los policías, todos de la comisaría de Monteagudo, una localidad del interior tucumano, actuaron vestidos de civil y con autos particulares. Juan y Luis, que iban de pasada, fueron alcanzados por las balas de la policía. Juan se cayó de su caballo y comenzó a ser golpeado. A Luis lo persiguieron hasta la espesura del monte donde, aún en su caballo, le pegaron el tiro que terminó con su vida. Desde ese momento y aprovechándose de que Juan no pudo observar lo ocurrido, los policías montaron un operativo para hacer desaparecer el cuerpo de Luis. Éste fue arrojado envuelto en bolsas a 100 metros de profundidad en un barranco montañoso de muy difícil acceso, a 120 km de distancia, en una zona conocida como Las Banderitas, provincia de Catamarca, en el límite con Tucumán.

El accionar de la familia Espinoza y de los vecinos fue clave para desmantelar el operativo de los policías ya que, al no encontrar a Luis, realizaron cortes de ruta y autoorganizaron la búsqueda en la zona donde había ocurrido la represión. Obligaron a la justicia a investigar hasta dar con el cuerpo de Luis. De esta manera se llegó a los nueve policías y dos civiles responsables. Los vecinos contaron que el accionar criminal de la policía en la zona era común y corriente. Pese a la gravedad de los hechos en su momento el gobierno de Manzur-Jaldo sostuvo al ministro de Seguridad, Maley. Este recién fue reemplazado en octubre de 2021 y protegido con un cargo nacional.

Pese a la distancia en la que viven y al intento de silenciamiento por parte del gobierno, los familiares de Luis y Juan se hicieron presentes en distintas marchas para reclamar justicia. Se vincularon con los familiares de víctimas del gatillo fácil que están permanente movilizados. Este 24 de Marzo marcharon en la convocatoria del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia y luego participaron en el acto que realizó Política Obrera, donde plantearon la importancia de movilizar a la sentencia. La familia Espinoza no está conforme con la sentencia y buscará apelar las penas menores a los partícipes secundarios y las absoluciones. Acompañaremos las distintas instancias, como lo venimos haciendo junto a los familiares de víctimas del gatillo fácil y la impunidad, en la perspectiva del desmantelamiento represivo, que es la única manera de terminar con el gatillo fácil, las torturas en cárceles y comisarías y la impunidad.

Suscribite al canal de WhatsApp de Política Obrera