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Los docentes autoconvocados de la provincia nuevamente estamos haciendo historia. Con cinco semanas de huelga no solo mantenemos un alto acatamiento y una unidad en nuestras bases. A diferencia de todas las autoconvocatorias anteriores, ahora luchamos codo a codo con los trabajadores autoconvados de la salud y las ordenanzas de escuelas. Ambos autoconvocados porque los burócratas sindicales de la salud también avalan el 34% trucho de Sáenz y, junto con la CGT local, intentan embellecer la ley antiprotestas, aprobada en tiempo exprés por la legislatura, que vulnera el derecho democrático de toda la población.
Enfrentamos las represiones y el apriete judicial sobre 19 compañeros imputados falsamente, la violación a nuestro derecho a huelga con descuentos ilegales; las reuniones con funcionarios que sólo buscaban desmoralizarnos y que nos bajemos de la lucha. También la aprobación de una ley antiprotestas y una feroz y costosísima campaña mediática de ataques y falsificaciones para descalificar nuestros legítimos reclamos. No debemos olvidar los aprietes de los supervisores y ciertos directivos, particularmente sobre docentes no titularizados.
Junto con la masividad de nuestra huelga, la lucha en común con trabajadores de la salud y ordenanzas, ha sido un gran punto de apoyo para enfrentar todos los ataques recibidos. También la solidaridad de organizaciones sociales y piqueteras, del movimiento estudiantil y de padres. Esta unidad es posible porque somos parte del mismo contingente social de trabajadores con salarios de pobreza.
Para esta semana entran en huelgas parciales por el salario, por la enorme presión de sus bases, sindicatos municipales como Ademus y UTM. Trabajadores mineros autoconvocados contra el incumplimiento sistemático de las patronales mineras de su convenio colectivo. Choferes de UTA, denuncian el mal estado de los coches y los aprietes patronales para cumplir frecuencias imposibles para no poner más unidades en circulación. Los trabajadores judiciales también están en pie de lucha por su salario. Dirijámonos a ellos, sobre todo a sus bases, para coordinar y unificar acciones de lucha.
Por otro lado, la ley antiprotestas que, entre gallos y medianoche, es manifiestamente inconstitucional. Vulnera el derecho de reunión y protesta. Debemos exigir que sea vetada. Que el Gobernador que la impuso no la promulgue. Convoquemos a las organizaciones de derechos humanos, sindicatos y delegados combativos.
Armemos comisiones para recorrer lugares de trabajo para unirnos con otros trabajadores en la lucha por el salario coordinando medidas. Convoquemos junto con los compañeros de salud y ordenanzas a una asamblea provincial de trabajadores para tomar medidas en común. De este modo arrancaremos al gobierno una reunión en nuestros términos: el salario mínimo igual al costo de la canasta familiar por el que peleamos, la caída de las causas truchas sobre nuestros compañeros, el pago de los días de huelga y el veto a la ley antiprotestas de Sáenz.