Junio 2023: la jubilación que cobra el 80% de los jubilados es de $70.000

Escribe Charly Petrillo – Jubilados Clasistas

Tiempo de lectura: 2 minutos

La inflación producida y acentuada por la creciente insolvencia del Estado se ha convertido en una “espada de Damocles” que carcome los haberes jubilatorios mensualmente, pero acrecienta las arcas de los distintos sectores capitalistas.

A partir de junio el aumento acorde a la fórmula de movilidad jubilatoria será del 20,92 %. Con este incremento, los haberes, en relación al mismo mes del 2022, habrán acumulado un aumento del 89 %, en comparación con una inflación, en el mismo periodo, del 108,8 %. Los jubilados perdimos 20 puntos.

Además de un haber de $ 70,938, recibiremos un bono de $ 15.000 en junio, $ 17.000 en agosto y de $ 20.000 en setiembre, decreciente hasta quienes cobren los dos haberes mínimos.

Estos bonos no se incorporan al haber mensual y, como refuerzo frente a la inflación, son absolutamente insuficientes; tampoco son para todos los jubilados, continuando el “achatamiento de la pirámide”.

Aun así, con los bonos, los haberes jubilatorios están por debajo de la línea de indigencia (hoy en $94.000), así como la PUAM (Pensión Universal al Adulto Mayor) de $ 56.700 y las PNC (Pensiones No Contributivas) de $ 46.700. Hoy la canasta familiar alcanza ya los $ 390.000.

Por otro lado, debemos considerar además que los datos inflacionarios son distorsivos y mentirosos. Según datos del Centro RA de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, las subas interanuales de alimentos y bebidas lideran el ritmo del aumento de la inflación, en marzo y abril promediaron el 9,5% mensual dato que anualizado significa un 197% de inflación para estos rubros que son los que más consumen los sectores de menores recursos, los jubilados y pensionados.

¿Que nos espera a los jubilados? Oficialistas y oposición están embarcados en una guerra sin fin por el reparto de las candidaturas, mientras tanto destinan millones de dólares al pago de una deuda usuraria. Los salarios y haberes siguen por debajo de las líneas de indigencia y de pobreza.

Los planes elaborados en la cocina del FMI son la continuidad de la desindexación de salarios y jubilaciones, la consolidación de la precarización laboral que afecta y afectará en un futuro a los trabajadores para acceder a su jubilación. El achatamiento de la pirámide. La elevación de la edad jubilatoria para con ese dinero confiscado pagar los intereses de la deuda. La destrucción de los mal llamados “regímenes especiales”, en primer lugar, los docentes.

Aumento inmediato de $ 150.000 a trabajadores y jubilados. No al aumento de la edad jubilatoria. Salario mínimo igual a la canasta familiar hoy en $ 390.000. Haber mínimo igual al 82 % móvil de esa canasta, indexado mensualmente por inflación.

Suscribite al canal de WhatsApp de Política Obrera