Escribe Mariano Hermida
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El gobierno local y la dirección del Sindicato de Trabajadores Municipales de La Matanza (STMLM) han pactado nuevamente aumentos miserables. Según difunde el sindicato en un flyer -porque el acta acuerdo no circuló, ni tampoco las grillas salariales- han firmado con el “compañero Fernando Espinoza” una “recomposición salarial” del 20 % retroactivo a agosto, un 10 % a cobrarse en septiembre y un bono de $30.000 por única vez.
El salario básico de un trabajador municipal, en el mejor de los casos, es de $96.000. Un médico municipal, por ejemplo, cobra un básico de $42.000. Son salarios de indigencia, ´complementados´ con un conjunto de ítems vinculados a cláusulas flexibilizadoras como presentismo, premios, etc. Con una inflación mensual del 12,1 % el acuerdo firmado por Espinoza y Troncoso -secretario general de STMLM- constituye un agravio para los compañeros municipales que, cuando perciban la cuotita del aumento, la inflación ya se los habrá devorado. Las condiciones de trabajo ni siquiera fueron puestas a debate en la paritaria.
Naturalmente el acuerdo no fue validado por ninguna instancia de base. Ningún municipal aceptaría seguir destruyendo su poder de compra ante un escenario hiperinflacionario y con una megadevaluación en ciernes.
La seccional CICOP, que nuclea a trabajadores de salud de los hospitales municipales, no ha denunciado el acuerdo cuando ya tiene una semana. La central viene de realizar una mesa debate "en defensa de la salud pública" con funcionarios de Kicillof y el gobierno nacional, sumándose a la campaña “Massa presidente", es decir del responsable de una devaluación del 22 % que ha golpeado fuertemente a salarios y jubilaciones. Le han firmado todos los acuerdos paritarios al gobierno provincial, que ejecuta un ajuste sistemático sobre la salud pública y los salarios de los trabajadores de la salud.
En los hospitales que dependen del Municipio el acuerdo salarial fue repudiado por los trabajadores. Las compañeras y compañeros del Hospital del Niño de San Justo, quienes sostienen una firme lucha contra el vaciamiento y la precarización laboral, han hecho pública una carta donde rechazan el acuerdo y denuncian que “la devaluación de agosto posterior a las elecciones fue del 22 % en una única semana y las estimaciones más optimistas prevén una inflación para septiembre mayor al 11 %. El dichoso bono ya fue percibido por nuestros compañeros provinciales hace más de una semana; nosotros lo recibiremos en octubre absolutamente devaluado. ¿De qué logro nos hablan? Es evidente que ni el intendente ni el sindicato viven con nuestros sueldos”.
Además, los trabajadores municipales no tienen convenio y, por lo tanto, quedan expuestos a todo tipo de arbitrariedades por parte del Estado. La carta de los compañeros del Hospital de Niños culmina llamando “a todos los municipales a visibilizar la situación de indigencia, precariedad y vaciamiento que seguimos soportando en pleno año electoral. A organizarnos y defender nuestro salario y reclamar condiciones dignas de trabajo”.
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