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El protagonismo de los mandatarios provinciales durante el debate de la ley ómnibus fue destacado por todo el periodismo político. En esa tesitura es que Milei los ha acusado de haber sido los responsables de que la ley ómnibus haya vuelto a comisiones, ya que no existió acuerdo en el tratamiento en particular de la norma. Las repercusiones de este fracaso del gobierno fueron la liquidación del fondo compensador, destinado al pago de subsidios para el transporte del interior, y en la liquidación del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID).
Estas medidas fueron sorpresivas para los elencos provinciales. Tal es el caso de Maximiliano Pullaro, un radical vinculado al sector de Rodríguez Larreta-Lousteau-Yacobitti y que una vez que Patricia Bullrich fue incorporada al gabinete, depositó garantías en el gobierno de Milei aunando una relación auspiciosa. Nada de esto se está corroborando a inicios del 2024.
Dialoguismo en crisis
Desde el ropaje de “dialoguista”, no tuvo ningún reparo en que el Presidente obtuviera las facultades delegadas del Congreso, bajo la excusa de que todos sus antecesores desde el 94’ a la fecha las obtuvieron. Tampoco la reforma reaccionaria del derecho del trabajo, ni en los recortes de áreas tan sensibles como salud. Fue otro interés el que comenzó a inclinar la balanza del mandatario: torpedeó la ley ómnibus cuando ésta atacaba la producción de las empresas de biodiésel en la provincia. Los cambios que se pretendían eran totalmente perjudiciales para los capitalistas de estas energías renovables, donde el mercado hubiera quedado monopolizado por las entradas de las petroleras y de las cerealeras multinacionales. Capitulo siguiente fue la capitulación de Milei y Caputo con el “capítulo fiscal”, que pretendía imponer retenciones a las exportaciones y que provocó rechazo de las agroexportadoras, quienes se manifestaron mediante sus representantes políticos -los gobernadores.
Ni lento ni perezoso
En las semanas iniciales a su mandato, Pullaro se había limitado a promocionar la “lucha contra el narcotráfico” como un emprendimiento sin cuartel y dispuesto a pagar todas las consecuencias. Esta imagen no tiene nada de heroica. Por el contrario, está avanzando con toda una serie de contra-reformas en materia penal y de seguridad que no se diferencian en nada a la política del imperialismo en la región y que retacea garantías constitucionales. Mientras tanto, los escándalos que vinculan a la estructura del estado con el crimen organizado no cesan: fueron halladas 4 hectáreas de marihuana en Arroyo Leyes, un “vivero” que requería de un consumo eléctrico exagerado e inadvertido por las autoridades y por el cual la Empresa Provincial de la Energía tiene que dar explicaciones ante la posibilidad de complicidades dentro de la misma. Este cuadro lo completa la imputación del fiscal Matias Edery, quien otrora fuera galardonado por haber instado la persecución penal contra Armando Traferri -el senador de San Lorenzo investigado como jefe de una asociación ilícita- con una serie de delitos han haberse involucrado con una testaferro de Los Monos y haber asesorado en juicios por narcotráfico a otros involucrados.
Ahora bien, no puede obviarse que el gobernador ha cobrado un protagonismo singular en ascenso. La sistematicidad con que es presentado en los medios de comunicación es símil a un candidato en campaña electoral. El resquebrajamiento del gobierno de Milei, el desgaste que ha tenido en tan poco tiempo de mandato y la debilidad que ha expresado ante las distintas clases sociales aran el terreno para la aparición de otras figuras. La recesión que el programa de Caputo provocará en la economía es revisado por los capitalistas con mucha preocupación. Toda crisis es una oportunidad.
“Se escuchan ofertas”
No por nada, la burguesía ha puesto atención en iniciativas como la de “Santa Fe Global”. En este lanzamiento se hicieron presentes capitalistas locales y el “establishment”, incluso el embajador norteamericano Marc Stanley, con una gran expectativa, relatan las fuentes. Esta política pretende incorporar al Estado una suerte de cancillería provincial, a los efectos de entablar relaciones en el resto del mundo donde ubicar exportaciones a cambio de créditos y financiamiento de infraestructura. Pero bien visto, lo que también se cuela aquí es la lucha por las zonas de influencias entre el imperialismo y China. Sucede que se han relanzado las tratativas entre el Ente de la Zona Franca Villa Constitución donde la norteamericana Nitron pretende asociarse a al concesionario portuario “PTP Group” sellando un acuerdo en desmedro del avance de capitales chinos en la región.
El ´ajuste sobre el ajuste´ y los trabajadores
Pero cualquier pretensión de ser un punto de reagrupamiento en la escena nacional en medio de toda esta crisis todavía debe superar el terreno de la lucha de clases. Antes de que los subsidios fueran arrebatados, ya el ejecutivo provincial había señalado que el ajuste era imprescindible y que no gastarán más de lo que ingresa. En esos términos, se han lanzado los tarifazos en los servicios públicos -luz, agua y tasas inmuebles. Por otro lado, ha comenzado la ronda de las discusiones paritarias desconociendo el acuerdo del 2023, mediante el cual les corresponde a todos los trabajadores del sector publico -docentes y estatales- un aumento del 36%. Solo ha cumplido con un 14%, ante una inflación desenfrenada. Si esto no fuera suficiente, ha cesanteado a centenares de estatales que habían conseguido su estabilidad laboral en el último tiempo. La prepotencia patronal ejercida desde el Estado es un guiño a todo el arco capitalista.
Esta planteado objetivamente la necesidad de luchar por la recomposición salarial y los puestos de trabajo, la defensa de la caja de jubilaciones y los convenios colectivos de trabajo. No solo en el empleo público: la crisis se trasladará a las grandes fábricas del cordón industrial santafesino con la intención de avanzar con despidos y suspensiones ante un “escenario adverso”. Pullaro ya ha manifestado en más de una ocasión que no tolerará los bloqueos de fábricas y los cortes de ruta. Es la premonición de las luchas que no podrá evitar.
Desde Política Obrera nos comprometemos a discutir esta caracterización con cada trabajador, señalando la necesidad de las auto convocatorias inscriptas en la perspectiva de la huelga general.
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