Universidad: la huelga educativa se ha abierto paso

Escribe Daniel Blanco

Se debate ponerle fecha a una nueva Marcha Federal.

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El Frente Sindical Universitario Nacional en el que confluyen las federaciones docentes, no docentes y estudiantiles (CONADU H, CONADU, FEDUN, CTERA universitaria, UDA, FAGDUT, FATUN y FUA), el 4 de julio se reunió con las autoridades del CIN (la entidad que agrupa a los rectores de todas las universidades del país) en la que denunciaron la falta de solución de parte del gobierno a los reclamos salariales y un conjunto de atropellos que se estaba produciendo en diversas universidades por parte de las autoridades de las mismas (en la universidad de Mendoza el descuento de los días de paro, en la del Litoral, el no reconocimiento de la antigüedad a los docentes de la escuela Granja) daba cuenta que, luego de la monumental manifestación de masas del 23 de abril, los reclamos de los docentes y no docentes no solo no se habían solucionado, sino que la caída salarial no se había detenido y que en varios casos eran los propios rectores los encargados de aplicar medidas represivas y de ajuste contra los trabajadores.

En ese cuadro, el gobierno decidió endurecer la ofensiva contra los trabajadores de la educación levantando toda negociación paritaria y resolver la cuestión salarial por la vía de los decretos. Reuniones posteriores del Frente Sindical Universitario destacaron que la caída salarial promediaba el 60 % y que los aumentos que el gobierno comenzó a establecer por decreto no solo no recuperaban la caída salarial acumulada, sino que establecían cifras por debajo de la inflación en curso.

Durante julio también comenzaron a hacerse públicos pronunciamientos de los rectores denunciando que el gobierno incumplía con la transferencia de las cuotas presupuestarias. Con ese escenario, el Frente Sindical Universitario se vio obligado a acordar para el 2° cuatrimestre retomar endureciendo las acciones de fuerza; estableciendo el 12 de agosto como fecha de inicio de una huelga educativa.

Por su lado, y como síntoma de lo que vendría, los docentes agrupados en ADIUC (Córdoba) comenzaron un plan de lucha con paros crecientes y manifestaciones. Frente a estos anuncios de paros nacionales, desde el gobierno intentaron con diversas maniobras desinflar los reclamos. En Julio el gobierno decreto un aumento del 4 % que generó el repudio generalizado de la docencia, pero a la hora del cobro y sin previo anuncio, el gobierno le agregó un 3,5 % más al aumento, una medida que de ninguna manera terminô de conformar, y como respuesta obligada fue la ratificación del plan de lucha.

Con el inicio del mes de agosto, el Frente Sindical se encontraba enfrentado a ponerse a la cabeza de una huelga nacional con el precedente del 23 de abril. Por eso mismo, retiró de la agenda la realización de una 2° marcha Federal, a pesar de que era el planteo que se reiteraba en todas las asociaciones y asambleas de base. Posteriormente, y con una función distraccionista justificada en nombre de la unidad; el Frente Sindical resolviô la participación en la jornada del 7 de agosto por San Cayetano.

Ya sin márgenes, un nuevo plenario del Frente Sindical por medio de un comunicado ratificaba que a partir del lunes 12 se paraba por 72 horas (12,13 y 14) y a la semana siguiente por 48 horas (20 y 21). Sin embargo, casi en simultáneo, algunos de los agrupamientos que integran el Frente, como es el caso de FEDUN y FATUN (son las organizaciones universitarias que integran la CGT), salieron a anunciar que lo resuelto era paro el lunes 12 y la semana siguiente paro de 48 horas, y el referente de FEDUN salió a copar los medios con estos anuncios generando una gran confusión. En contraposición, algunas universidades dirigidas por el FAB (Frente de Asociaciones de Base, que integran la CONADU) como Rosario, Córdoba, Río Cuarto y Mar del Plata votaron en sus asambleas parar 6 días seguidos, del 12 al 17 de agosto e impulsar una nueva Marcha Federal.

El FAB se constituyó en el 2022, integra la CONADU y actúa como tendencia dentro de esa Federacion. Agrupa a las universidades de Mar del Plata, Nordeste, Chaco Austral, San Juan, Río Cuarto, Jauretche , José C. Paz, Rosario, Instituto Universitario Madres de Plaza de Mayo, Córdoba, UNIPE, Avellaneda, y General Sarmiento. Pronunciamientos en el mismo sentido han surgidos en distintas asociaciones de base de la CONADU H.

Con este cuadro, desde el gobierno ensayaron una última maniobra y convocaron para el viernes 9 a una reunión paritaria para discutir los salarios que resultó un gran fiasco y enardeció aún más los ánimos de las docencias y todas las organizaciones se pronunciaron repudiando la oferta del gobierno de un aumento del 3 % para agosto y el 2 % para setiembre, como única y última oferta. Así, traumáticamente, se fue abriendo y afirmando el reinicio de la lucha de los trabajadores, docentes y no docentes, de las 61 universidades nacionales. Los reclamos de recomposición salarial y aumento del presupuesto son las reivindicaciones centrales.

En distintas universidades se contemplan jornadas de paros activos, con clases públicas, concentraciones y marchas. En algunos casos se abierto la discusión de la ocupación de las facultades. En el caso de los rectores, en esta oportunidad han reiterado el apoyo a los reclamos y en algunos casos dan apoyo concreto para la materialización masiva de las acciones. En el caso de FEDUN han reiterado que solo van a parar el 12, pero hay asociaciones de base, como ocurre en Tucumán, que han resuelto que van a parar por 72 hs. acompañando a la ADIUNT, el sindicato combativo que integra la CONADU H.

En el caso de la FATUN también sostienen que van a parar solo el 12, pero en los días subsiguientes, en algunas regionales van a realizar acciones de agitación y difusión que visibilizarían los reclamos y las luchas de los sectores docentes.

La cuestión de la Marcha Federal, al compás del descontento y los pronunciamientos de las asociaciones de base, se ha reinstalado. La CONADU H ha convocado a un plenario de Secretarios Generales para el jueves 15 que en el temario, a la par de discutir el balance de la lucha y como continuar, figura el punto de la nueva Marcha.

El debate de cuándo concretarla tiene una gran importancia, pues la cuestión clave de la manifestación del 23 de abril fue la irrupción masiva del movimiento estudiantil. El calendario de clases es muy dispar. Actualmente hay decenas de universidades en las que las actividades académicas plenas no se han reiniciado. Todos coinciden en que la primera semana de setiembre es el momento más apropiado para lo cual el proceso de lucha huelguística se debe sostener, y el clima, o sea la preparación de la marcha se debe concretar desde ya, con asambleas, clases públicas, autoconvocatorias que superen la acción de freno de las burocracias estudiantiles, etc.

Los paros nacionales universitarios previstos se entrelazan objetivamente con los paros y manifestaciones crecientes en por lo menos 6 jurisdicciones de la docencia provincial, y que en el caso de Córdoba y Entre Ríos se expresan en manifestaciones extraordinarias de masas.

La huelga universitaria se va a concretar en un momento donde la paciencia colectiva de los trabajadores se está agotando y en el horizonte no se avizora más que la continuidad e incluso la profundización de la recesión, con sus secuelas de despidos y ataques a los derechos colectivos de los trabajadores.

Los conflictos y las luchas se multiplican. Ahí están en primera línea la huelga por tiempo indefinido de los aceiteros por el aumento salarial y contra el impuesto al salario, pero no son solo ellos. Los obreros del neumático agrupados en el SUTNA contra los despidos, los trabajadores petroleros contra los impuestos al salario, los estatales contra los despidos, etc. dan cuenta de las inquietudes y luchas crecientes de los trabajadores que se desenvuelven a pesar del sabotaje de la burocracia de la CGT y de todas las burocracias.

La gran cuestión, estratégica, para llevar la lucha en curso a la victoria, es unirlas en un frente de lucha por el salario, y todos los reclamos pendientes. En este sentido, el desarrollo de la huelga universitaria puede constituir y darle un fuerte empuje a que las fuerzas elementales de los trabajadores irrumpan y empujen a que se concrete por medio de plenarios, congresos, un frente de unidad por la huelga general.

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Universidad: si no es ahora, ¿cuándo? Por Anahí Rodríguez, 08/08/2024.

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