Trump retira a Chevron la licencia para operar en Venezuela y prepara una guerra para apropiarse de los recursos minerales de Esequibo

Escribe Joaquín Antúnez

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La Casa Blanca ha confirmado los cambios anticipados por Donald Trump y Marc Rubio sobre la licencia de operaciones especiales (licencia 41A) para Chevron en Venezuela. La nueva normativa difundida por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) obliga a la empresa a cesar sus operaciones en territorio venezolano el próximo 3 de abril. Habilitadas por Joe Biden a finales de 2022, las actividades podían extenderse durante 6 meses más, pero Trump ha decidido ponerle fin de inmediato.

Según estimaciones bastante precisas, Chevron paga en impuestos entre 400 y 500 millones de dólares al Estado venezolano. Un ingreso anual que, junto a otras compañías europeas, roza los 3.200 millones de dólares. Chevron produce 256 mil barriles diarios, que representan un 40% de la producción diaria de Venezuela.

Según Trump, el propósito es ponerles un final a las medidas “que han financiado vergonzosamente al régimen ilegítimo de Maduro” (La Nación, 26/02). Trump acusa a Maduro de no haber cumplido con la repatriación en tiempo de inmigrantes, a pesar de que Venezuela puso a disposición dos aviones de la estatal Conviasa y realizado tres viajes. Los repatriados fueron 190 desde Miami y otros 176 desde Honduras.

El gobierno venezolano hizo saber a la administración Trump que suspende por tiempo indeterminado la repatriación de nuevos contingentes de migrantes en respuesta al retiro de Chevron. En un acto oficial realizado en conmemoración del 8 de marzo, Maduro aseguró que “se ha creado un problemita” que destruye las vías de comunicación abiertas con la visita del enviado especial, Richard Grenell, el pasado 31 de enero. Maduro repitió que esperaba gustoso poder repatriar a sus compatriotas “con abrazos amorosos”. Calificó a la salida de Chevron como “un negocio que ellos se pierden”. Durante enero se ha visto un rebote de la inflación y una devaluación significativa del bolívar. Las expectativas de sostener un crecimiento económico del 4% del PBI, como en 2024, se han transformado en una alarmante contracción del 2%.

Corina Machado y González Urrutía, a quien Estados Unidos reconoce como presidente electo, han saludado la decisión de Trump. Pero la oposición que dirige más de un centenar de municipios y cuatro gobernaciones, ha denunciado que esta medida solo afectará al pueblo venezolano, y exige que se renueven las licencias. Hace años que la derecha se ha dividido entre quienes defienden “espacios de intervención democrática” a cambio de reconocer a Maduro y todos los poderes del poder chavista, y un sector ligado por completo a los servicios de inteligencia estadounidenses que reclaman una intervención militar extranjera. La salida de Chevron es celebrada como un puntal en dicha política.

Las elecciones regionales y la crisis por el Esequibo

Las elecciones regionales convocadas para este año han sido retrasadas para mayo por la ausencia de candidatos opositores, a lo que se han sumado los gobernadores y legisladores del partido Acción Democrática, al igual que en 2017 y 2021.

La mayor apuesta de Maduro es lograr llevar adelante elecciones en la zona del Esequibo, una zona rica en petróleo y otros minerales que disputa con el gobierno de Guyana. La Guyana es un reducto de la colonización británica de América, un país con 800 mil habitantes que viven en la pobreza extrema. Para la petrolera Exxon Mobile es la gallina de los huevos de oro: una reserva submarina con 11.000 millones de barriles de crudo, según los estudios realizados. El PBI ha crecido a tasas astronómicas anuales del 20 por ciento. La integración de Esequibo es una reivindicación histórica de Venezuela, que han compartido todas las fuerzas políticas, incluso la izquierda desde la fundación del Partido Comunista. El nacionalismo caribeño ha sido incapaz, sin embargo, de plantear la salida a este conflicto desatado por la ocupación colonial británica, mediante una unión federativa de ambos países. Sólo la Unión Socialista de América Latina pondrá fin a las disputas de fronteras en el continente y al fin de los enclaves del imperialismo, como Malvinas o Puerto Rico.

La tensión en la frontera ha escalado a niveles sin precedentes. Venezuela ha denunciado la presencia de bases y marines estadounidenses en la zona del Esequibo, algo que el gobierno de Guyana ha rechazado y pedido arbitraje de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con el apoyo del gobierno estadounidense.

Trump ha declarado su intención de recolonizar América Latina a como dé lugar. Ha ordenado al fondo norteamericano BlackRock a comprar las instalaciones portuarias del canal de Panamá a una empresa de Hong Kong, un territorio autónomo de China. Venezuela se ha transformado, con más fuerza que en el pasado reciente, en un terreno de guerra en el marco de una guerra imperialista mundial.

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Maduro acordó con Trump la repatriación de venezolanos y la paulatina salida de capitales chinos de Venezuela A cambio le renuevan la licencia a Chevron para operar en el país. Por Aldana González, 10/02/2025.

Biden prorroga las licencias petroleras en Venezuela Por Jacyn, 13/01/2025.

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