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El miércoles 12 se llevaron a cabo las asambleas ordinarias del SUTEBA, en donde se consideró la memoria, balance económico y política gremial del 2026 para el sindicato. En esta oportunidad, también se votaron las juntas electorales seccionales para las elecciones del año próximo. El viernes 14 se realizará el congreso ordinario, en donde los delegados votan de acuerdo a lo resuelto por la mayoría en las asambleas seccionales.
Los documentos de la conducción provincial liderada por Roberto Baradel y la Celeste se conocieron apenas unas horas antes de realizarse las asambleas, vaciando de debate las propias asambleas y, por supuesto, lo que será el congreso. Lo escrito allí es también una impostura. El punto número uno de la política gremial es “Impulsar la aprobación del Presupuesto Provincial 2026”, es decir, el presupuesto para pagar la deuda pública de Axel Kicillof ajustando aún más al salario docente y la educación pública. En materia salarial plantea que “la Paritaria Salarial sostenga su periodicidad, para lograr el recupero de la pérdida por el impacto inflacionario”, admitiendo que el salario viene perdiendo con la inflación. En cuanto a reformas laborales, afirma “Concretar el Convenio Colectivo de Trabajo Docente” del cual no se conoce una sola palabra. El documento finge demencia ante los paros provinciales que se llevaron adelante este año en repudio a la paritaria salarial, absolutamente masivos. En cuanto a medidas de lucha, no hay nada, apenas un genuflexo “dar continuidad a la lucha nacional”. Se plantea que “Los desafíos en este tiempo histórico para lxs Trabajadorxs, para nuestro Pueblo, tienen que estar principalmente centrados en el debate y la construcción de propuestas para desarmar la subordinación, a la que nos somete Milei, a la política imperial de Estados Unidos y a la injerencia de la piratería financiera global que está limitando nuestro desarrollo”. Venimos de sendas campañas electorales en donde el peronismo, al cual Baradel y la Celeste tributan, omitieron olímpicamente cualquier oposición a esa subordinación, lo cual persiste a la fecha. No existe, tampoco, medida de lucha alguna propuesta para enfrentarla.
Que todo esto es puro palabrerío lo demuestra el vaciamiento de las asambleas, con exclusiva participación del aparato de la Celeste, que aun así no defendió mínimamente esta política, así como tampoco pudo presentar un balance de las recientes elecciones y una perspectiva político-sindical para la docencia. Es notorio la ausencia completa de un programa alternativo al del liberticida Milei. En este cuadro, solo se pudo escuchar un compendio contradictorio de llamados a luchar “en unidad” contra Milei y, al mismo tiempo, a que los trabajadores y las agrupaciones combativas se sometan a la dirección de la burocracia.
Un dato significativo fueron los padrones de afiliados de las asambleas manipulados por la Celeste. La seccional de Tigre denunció que contaba con personas que “cotizan en sede” y no directamente desde su sueldo. El padrón de La Matanza estaba también visiblemente inflado.
El primer punto a votar en todas las asambleas fue la constitución de las juntas electorales. Como desarrollaremos en un próximo artículo, la lista Multicolor vetó nuestra participación en ella bajo la burocrática exigencia de que nuestra corriente debía votar también la Política Gremial de esa lista, cuyo contenido se conoció más tarde que la de la Celeste y a horas de las asambleas. Así las cosas, y mediante la movilización del aparato de la Celeste, ganaron las juntas electorales, la memoria, balance y política gremial en la mayoría de las seccionales, a excepción de Tigre, Marcos Paz y Bahía Blanca. Tomada la oposición a la Celeste en su conjunto, las votaciones más importantes se lograron en Matanza y La Plata.
Nuestra corriente, Tendencia Docente Clasista, rechazó la memoria y balance de La Celeste y presentó una política gremial propia en las asambleas de Matanza, San Isidro, Mar del Plata, Bahía Blanca, General Rodríguez, Almirante Brown, Merlo, General San Martin, San Miguel, José C. Paz, Pilar, Morón, Hurlingham y Ezeiza.
En el congreso del SUTEBA, nuestros congresales mocionarán por una huelga general contra el protectorado financiero de Trump-Milei, la inminente invasión militar de Trump a Venezuela y las reformas laborales antiobreras que, en el caso de la docencia bonaerense, encabeza Axel Kicillof.
