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El voraz incendio que ha consumido gran parte de las instalaciones fabriles del Ingenio La Esperanza, costó la vida de al menos cinco obreros hasta el momento. No es, sin embargo, una tragedia. Es la expresión más abominable de un largo proceso de vaciamiento capitalista, con la plena connivencia del Estado Provincial y de los gobiernos de los últimos 20 años.
El gobernador Gerardo Morales hasta ayer se jactaba de haber consumado el desguace final del Ingenio, para la venta, con el despido de la totalidad de la planta. Luego de arbitrar entre los grupos en disputa, en lo que podría ser un caso de fraude, el grupo Budeguer ofreció reincorporar a los trabajadores sin el reconocimiento de la antigüedad, categoría, salario de convenio, etc., para “ahorrar costos al máximo”.
De hecho, acaba de incumplir el pago de la segunda cuota por la compra, pero ha presentado un pedido de compensación por “obras” que no ha informado. También incumplió el compromiso de recontratar a los 600 obreros que trabajaron hasta el mes de julio pasado; ahora ha despedido a 19 obreros más.
Debe investigarse la incidencia de esta política patronal con el siniestro en curso, ya sea por falta de inversiones y mantenimiento, incumplimiento de normativas de seguridad, recarga de trabajo sobre los operarios por falta de personal, y hasta por capacitación del personal. El secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados del Ingenio La Esperanza declaró: “¿Nosotros cuantas veces lo dijimos? Esto era una bomba de tiempo” (EL Tribuno de Jujuy 20/11).
La lamentable suma de obreros muertos podría multiplicarse en las próximas horas porque hay decenas de obreros desaparecidos, que podrían haber quedado atrapados por el fuego y los escombros. Anoche se evacuó la casi totalidad de los pobladores de La Esperanza (600 metros a la redonda del Ingenio). Según el intendente local, en la noche hubo una explosión de un tacho de alcohol (ídem), lo que muestra la desidia patronal. Sin embargo éste tampoco se preocupó por determinar si la fábrica estaba en condiciones de funcionar. Todo el pueblo trabajador de La Esperanza y San Pedro, pero también de todo el ramal azucarero salto-jujeño, se ha conmovido y movilizado ante tan terrible siniestro.
Desde el Partido Obrero jujeño, integrante de la Tendencia Nacional del Partido Obrero, nos solidarizamos con los obreros del Ingenio La Esperanza y sus familias. Pero también denunciamos el crimen político y social perpetrado contra la clase obrera jujeña y reclamamos: