Escribe Luisina Montenegro
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Una nueva asamblea general de AGD-UBA, realizada el miércoles 7 con la participación de más de 100 docentes, deliberó sobre los próximos pasos a seguir, luego de una nueva reunión paritaria sin ofrecimiento salarial alguno por parte del gobierno. La asamblea votó por unanimidad profundizar el plan de lucha con un paro de 48 horas para reclamar el 40% de aumento salarial con indexación mensual por inflación y por la media canasta familiar para el cargo testigo. Este mandato será llevado al próximo Plenario de Secretarios Generales de Conadu Histórica.
Desde la Agrupación Naranja Tendencia hicimos referencia a la profunda crisis que atraviesa el gobierno, indisociable de su gestión capitalista de la pandemia, que significó un endeudamiento sin precedentes del Banco Central y del Tesoro. Los “socorros” como el IFE y las ATP se financiaron con Leliqs y tasas anuales del 40%, significando un enorme negociado para los bancos y fondos financieros. En este escenario, una profundización de la devaluación desataría una escalada hiperinflacionaria que agravará la miseria social actual. El crecimiento fenomenal de la desocupación y la pobreza durante los últimos meses, han puesto de relieve que la defensa del trabajo y de la vida misma es incompatible con este régimen social.
Como todos los gobiernos capitalistas, el de Alberto Fernández avanza hacia la "convivencia con el virus". En esta línea se inscribe la vuelta a las aulas anunciada por Trotta para los 6tos años, en una confesión del fracaso completo de la gestión educativa en el marco de la pandemia. Barbieri, por su parte, afirmó que existe un protocolo de vuelta a clases para la UBA. Rechazamos cualquier vuelta a las aulas en pandemia, menos aún en las actuales condiciones de aumento de contagios y colapso sanitario. Advertimos que no existen recursos para financiar ningún cuidado con un presupuesto educativo congelado desde 2019. La asamblea rechazó las declaraciones de los funcionarios y cualquier tentativa de retorno que no sea discutida por los docentes, estudiantes y no docentes de la universidad.
Propusimos también la realización de asambleas en todas las Facultades para organizar las medidas de lucha de la semana próxima y reforzar la campaña por el salario y las condiciones de trabajo. En la misma línea, propusimos un llamamiento a los distintos niveles educativos para impulsar una lucha conjunta en defensa de la educación, y la convocatoria desde el gremio a charlas-debate sobre el trabajo docente y las condiciones de aprendizaje. Estas propuestas fueron aprobadas por unanimidad en la asamblea.
Entre otros pronunciamientos importantes, la asamblea rechazó la imputación fraudulenta a Julián Asiner y Adrián Lutvak, ex co presidentes de la FUBA y apoyó al paro de la docencia pre-universitaria del curso de ingreso en el CNBA y el Pellegrini por los salarios adeudados. Se resolvió el repudio a la misión del FMI y el voto proimperialista del gobierno en la ONU, planteando la solidaridad con el pueblo trabajador de Venezuela.
Llamamos a todos los docentes de la UBA a redoblar nuestros esfuerzos y fortalecer el plan de lucha, en coordinación con otros sectores de la clase obrera que se encuentran dando pelea por el salario y las condiciones de trabajo bajo el Covid.