Tucumán: Unidad de los trabajadores, y al que no le gusta...

Escribe Daniel Blanco

Tiempo de lectura: 4 minutos

Una gran concentración, seguida de un acto, se concreto el miércoles 22, convocado por el SITAS (sindicato de la Salud) integrante del FESPROSA a nivel nacional, y los Docentes Autoconvocados, que reunió alrededor de dos mil trabajadores, para reclamar la revocación del Decreto 1/1 del 6 de enero de Manzur, que suspendió la cláusula gatillo por 6 meses, y habilitó a desconocer esa cláusula acordada para la paritaria 2019 en el pago de la actualización del ultimó trimestre, o sea la confiscación lisa y llana de un aumento que fue estimado en un 15% .

Al momento de escribirse esta nota se estará concretando el segundo paro de brazos caídos convocado por el SITAS. En la concentración fue notable la presencia del Partido Obrero (T) y del Polo Obrero (T).

El acto tuvo tres oradores, dos dirigentes del SITAS, Julian Nasif y Adriana Bueno, y en nombre de la Docencia Autoconvocada, Raquel Grassino dirigente de Tribuna Docente. Cuando culminó el acto se organizó una gran marcha que recorrió las calles céntricas de la ciudad.

Esta jornada unitaria fue el resultado de un proceso de lucha que arrancó el 7 de enero, con una autonconvocatoria docente. Le siguió otra al día siguiente de parte del SITAS a la que confluyeron también los docentes autoconvocados como expresión de la necesidad de una lucha unida, luego un primer paro de la salud el 9 de enero, nuevas autoconvocatorias de la docencia el martes 14 con nuevo llamado a la unidad, y un plenario de delegados interhospitalario, donde las bases de la salud le dio mandato a los dirigentes del SITAS para concretar la unidad con los demás sectores estatales en lucha que terminó materializándose en la jornada del 22.

Cómplices del ajuste

Quienes decidieron boicotear todo proceso de lucha fueron los dirigentes tradicionales de ATE, y los de la Federación de sindicatos municipales. Habían asumido el compromiso de convocar a un plenario provincial de delegados y trabajadores estatales, pero luego lo levantaron para reunirse con Jaldo, el vicegobernador a cargo del ejecutivo. En esa reunión se encontraban presentes entre otros el secretario general de ATSA (Ramírez, actual legislador del oficialismo), el secretario de ATE, Sánchez (vinculado a Cachorro Godoy), varios secretarios de sindicatos municipales, entre ellos Vicente Ruiz del sindicato municipal de Aguilares y a la vez uno de los dirigentes del PCR en la provincia. O sea un Frente de Todos contra Todos los que quieren derrotar el ajustazo.

En la reunión Jaldo no comprometió ninguna fecha para el pago de la cláusula Gatillo, en particular con el pago del 15% correspondiente al último trimestres de 2019. Pidió sí que se levantaran las marchas y paros. Los dirigentes presentes a partir de esa reunión se han borrado de la escena.

La Justicia y Manzur

Manzur había llamado a los demás poderes del estado a acompañar su decreto en sus respectivas áreas. Todos los medios hicieron trascender que la Corte iba a adherir, pero a último momento pegó un volantazo y decidió no pronunciarse. En rigor en la justicia no existe la cláusula gatillo, sino un sistema de enganche con la movilidad que recibe la Corte. Ahora la Corte ha resuelto mantener los sueldos de los judiciales con el último aumento de setiembre, que deben absorber la inflación del último trimestre del 19. Estas volteretas de la Corte obedecen al hecho de que hay pedidos de amparo de gremios y trabajadores contra el decreto de Manzur, que a toda vista, es ilegal e inconstitucional. De esta manera puede fallar suspendiendo el decreto, obligar a pagar la ultima actualización del 2019 y en simultáneo mantener el ajuste en el ámbito judicial.

Esto ya fue percibido por los sindicatos judiciales y por eso han proclamado que van a sumarse a la lucha que ya se ha emprendido contra el decreto ajustador de Manzur.

Interna en el gobierno

En este cuadro de luchas y movilizaciones, ha salido a luz una interna en el ejecutivo provincial. El vice, Jaldo, quien maneja la legislatura y tiene anudado los lazos con los intendentes y delegados comunales y con todo el aparato punteril del PJ, ha anunciado que pretende ser el nuevo gobernador a partir del 2023, lo que choca con las pretensiones de reelección de Manzur, para la cual sería necesaria una reforma constitucional. Algunos medios ya ven una potencial fractura política.

Perspectivas

En el acto del miércoles 22 los oradores llamaron a profundizar la unidad y la lucha. Han convocado a un paro de 48 hs. de la salud y a realizar numerosos cortes y asambleas frente a los centros de salud en conjunto con la docencia y las organizaciones sociales que en algunos casos se pueden transformar en verdaderas asambleas populares a favor de la lucha y los reclamos. De hecho se ha conformado una coordinadora de lucha provincial que se debe extender y consolidar con las próximas acciones de lucha.

El gobierno y la burocracia cómplice están jugados a quebrar el proceso de lucha antes de febrero, en que retornan la mayoría de los estatales de sus vacaciones. Incluso desde algunos sectores vinculados al gobierno han hecho correr el rumor de reponer el pago de la actualización del último trimestre, y eliminarla en la próxima paritaria poniendo un techo salarial bajo. En cualquier caso, las perspectivas que se han abierto, atendiendo al clima de deliberación y bronca contra la dirigencia burocrática de los gremios que se mantienen apartado de la lucha, preparan las condiciones para convocar a un plenario general de delegados de bases con mandato para resolver una lucha de conjunto, un paro activo provincial y la huelga general, que tire abajo el decreto ajustador e imponga una salida a todas reivindicaciones que van emergiendo en la lucha en curso.

Suscribite al canal de WhatsApp de Política Obrera