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El día de hoy se realizó una de las jornadas de lucha más importantes de las organizaciones de desocupados de los últimos tiempos. Las demandas principales se centraron en el reclamo de vacunas y la restitución del IFE con triplicación del monto, como medidas urgentes. Los desocupados y los trabajadores precarizados son el sector más golpeado por la crisis sanitaria y social actual.
Una de las denuncias más importantes que se levantó el día de hoy fue la del recorte de los programas sociales de parte del Ministerio de Desarrollo Social que dirige Daniel Arroyo. Según el ministerio, los recortes y la ruptura de los acuerdos alcanzados con todas las organizaciones en las últimas semanas se debieron a la decisión del ministro de economía, Martín Guzmán, de no girar los fondos necesarios. La decisión de Guzmán es inseparable de los acuerdos de deuda que el gobierno ya tiene en marcha con el FMI. Es por eso que las consignas “No al pago de la deuda” y “Fuera el FMI” tuvieron un lugar central en las protestas de todos los puntos del país.
Las acciones de lucha se llevaron a cabo a nivel nacional. En la Capital Federal, el corte total de la 9 de Julio reunió a más de 15.000 desocupados. La medida convocó a organizaciones como Barrios de Pie, FOL, MTR, Izquierda Latinoamericana y el Polo Obrero (oficial), entre otras.
Desde el Polo Obrero Tendencia, llevamos a cabo acciones en todo el país, y esa movilización mostró un salto en nuestra organización. La acción más importante, y así fue reflejada en los medios, fue el corte de los accesos a la Capital, reuniendo a 5000 compañeros distribuidos entre el Puente Pueyrredón, la Panamericana y el acceso Oeste. De conjunto, la Tendencia del Polo Obrero movilizó más de 10.000 compañeros en todo el país, con acciones importantes en Salta, Chaco, Concepción del Bermejo, Misiones, El Dorado, Santiago, La Banda, 9 cortes en Tucumán, Jujuy, Mendoza, San Juan y Pergamino. Cada punto de lucha culminó con un acto donde denunciamos la gestión capitalista de la pandemia, cobrándose la vida de miles de trabajadores, y exigimos el cese inmediato de las clases presenciales que defienden el gobierno y la oposición en todo el país.
Durante los cortes, el Ministerio de Desarrollo Social se comunicó con el Polo Obrero Tendencia y ofreció una reunión inmediata. En dicha reunión, los funcionarios accedieron a realizar algunas concesiones a los reclamos presentados, aunque pidieron más tiempo para poder concretarlas. Nuevamente, la pelota fue tirada al Ministerio de Economía. Sin embargo, en la mañana de hoy, el propio Alberto Fernández declaró en una entrevista radial que “hoy por hoy no hace falta” la asistencia social, ya que "objetivamente la actividad económica está funcionando a pleno". Los índices oficiales, sin embargo, hablan de la caída del empleo y del aumento de la pobreza. La política de recortes y ajuste es una política de Estado para rescatar al capital de su más profunda impasse.
Las conquistas de la movilización tienen que ver con su contundencia y con la certeza de un desarrollo mayor en un futuro cercano. La nueva política de restricciones anunciada por el presidente es una cortina de humo. La necesidad de una cuarentena estricta, con todos los recursos económicos colocados al servicio del sostenimiento de la mayoría trabajadora, está por fuera de la agenda del gobierno. Debemos llevar a los barrios las conclusiones de esta gran jornada de lucha y abrir una deliberación sobre una lucha de alcance general para imponer una salida de los trabajadores ocupados y desocupados en esta gran crisis.