Escribe Mali Quintillán
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El sindicato docente de Tierra del Fuego anunció un paro de 48 horas los días 2 y 3 de agosto en reclamo de recomposición salarial, luego de un congreso provincial. Poco antes, una caravana de protesta había sacado a la calle las principales demandas de los maestros – recomposición salarial inmediata, cargo testigo a $75.000 y que se cumpla con el 100% de zona para que no haya ningún docente con salario por debajo de la canasta familiar.
En Chubut, las asambleas escolares también lograron que ATECH anuncie un paro para los días 26 y 27 de julio, cuando está previsto que se retome la actividad escolar en la provincia, exigiendo recomposición y aumento salarial, garantía de funcionamiento del transporte escolar, obras de infraestructura y aumento de partidas ordinarias y extraordinarias de Covid-19. Sin embargo, la dirección chubutense condiciona la implementación de la medida al llamado del Gobierno provincial a reunión paritaria – por lo pronto, a su convocatoria, no a la satisfacción de las demandas.
En Santa Cruz, ADOSAC, en un plenario de secretarios generales, se limitó a declarar el estado de alerta y movilización” por falta de paritarias salariales.
Finalmente, ATEN (Neuquén) y UnTER (Río Negro) tampoco prevén medidas de fuerza para el re inicio de clases, a pesar de que en ambas provincias los contagios COVID han ido en aumento y los sistemas de salud han estado en reiteradas oportunidades prácticamente colapsados. En Río Negro, particularmente la dirección sindical ha clausurado la realización de Congresos en nombre de la pandemia, pero no recurre a la huelga contra la presencialidad escolar.
En las cinco provincias patagónicas los aumentos acordados en las paritarias de marzo quedaron por debajo del índice inflacionario de la zona y en todas se mantienen condiciones de trabajo y edilicias muy deficitarias.
Es el momento para que las bases docentes de todo el país se organicen en comités de lucha, agrupaciones independientes, movimientos autoconvocados y un estado deliberativo permanente para exigir a cada dirección provincial y a CTERA el llamado a una huelga nacional por la vida y los salarios.