Multitudinaria jornada nacional piquetera

Escribe Leonardo Perna

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Este miércoles 29, bajo la consigna “Por pan, techo y trabajo. ¡El Fondo al carajo!”, un arco de organizaciones piqueteras salió en todo el país en forma coordinada, denunciando los incumplimientos del Ministerio de Desarrollo Social y la baja de programas sociales en el marco de una crisis económica y social como no se ha visto en décadas.

Las organizaciones, en su comunicado, también denunciaron el gigantesco esquema de trabajo precario que promociona el gobierno. Ofrece de manera directa una parte de los montos recaudados a través de las bajas de programas a las organizaciones para que pongan en funcionamiento pequeños proyectos productivos de todo tipo. Una cuña punteril y patronal hacia adentro del movimiento de desocupados.

Mientras, avanza el “Plan Empalme” -que ahora suma a las empleadas domésticas con el “Plan Registradas”- subsidiando de manera directa el 50% del salario de las patronales que entren al programa. De esta manera se establece una competencia desigual entre los trabajadores formales y los que no lo son. Un ataque a los convenios laborales a pedido de los sectores empresarios.

Jornada de lucha

Desde la mañana empezaron a organizarse las columnas en los puntos de acceso a Capital: en el Puente Pueyrredón con más de 3000 compañeros, en Puente Saavedra con 4000 y en Acceso Oeste Liniers con 4000. A pesar del gran operativo policial para impedirlos, la masividad de la acción habló por sí misma y garantizó la medida hasta altas horas de la tarde. Estuvieron presentes en forma coordinada el Polo Obrero Tendencia, OCR, Resistencia Popular, 19 y 20 de Diciembre, Ana María Villarreal, FTC-M29, MUP-20 y Juventud Combativa.

La jornada, a lo ancho del país, contó con la participación de decenas de miles de piqueteros. En las provincias se sumó la coordinación por los reclamos regionales. En Bahía Blanca, junto a la UTD, corte frente al municipio y movilización; en San Salvador de Jujuy se movilizaron más de 12 de barrios; en Salta capital, cortes en Colonia Santa Rosa y en Mosconi; en Chaco, gran jornada en varios municipios; en Mar del Plata, junto al FOL, Segunda Independencia y la Darío Santillán, frente al Municipio; en Entre Ríos, corte de accesos en la ciudad de Paraná junto a FOL, MTR-H y la OLP; en Pergamino, marcha a Desarrollo Social; en Mendoza, corte en el nudo vial; en Santiago del Estero en la capital, en Termas de Rio Hondo y en varios municipios; en Misiones, a pesar de la lluvia, en El Dorado y en Posadas cortando la Ruta 12 de tráfico pesado; en Tucumán, jornada en coordinación con cortes de ruta. También estuvimos presentes en Córdoba. Estas son algunas de las acciones llevadas adelante en el día de ayer.

La repercusión en los medios de comunicación -con entrevistas radiales, televisivas y en los portales de Internet- recogió todo el impacto de la medida, en un marco de corrida financiera y de crisis política del gobierno. Los funcionarios de Desarrollo Social, en lugar de ponerse a la altura de semejante situación social y de reclamos, se dedicaron a mal informar a los medios planteando que el conflicto estaba resuelto y que ya estaban definidas reuniones con las organizaciones como parte de una supuesta agenda de trabajo común que no existe.

El desafío por delante

Esta acción es la primera respuesta del movimiento obrero y popular contra el gigantesco plan de ataque sobre conquistas obreras históricas. La prácticamente nula respuesta del gobierno es parte de sus intentos para mantener en pie el “empalme” y los esquemas de trabajo basura. Estos son un punto crucial para mantener el nivel de ajuste fiscal y de presupuesto social que requieren los pagos de deuda y el acuerdo con el FMI, haciendo punta en voltear los convenios laborales. Mientras no hay noticias sobre el aumento de partidas a los comedores, las cargas al Potenciar Trabajo y otros programas adeudados, menos aún para los millones de desocupados desesperados sin plan y sin noticias del IFE y ni hablar de la burla de los 318$ para los jubilados. La famosa “platita” no aparece por ningún lado.

Para derrotar esta ofensiva de un gobierno políticamente acabado llamamos al conjunto del movimiento piquetero. La Unidad Piquetera debe convocar a una acción común y un plan de lucha para poner fin a esta política hambreadora y anti-obrera. Solo con más unidad y lucha será posible frenar el ajuste y que se atiendan los reclamos. Los desocupados no pueden ser usados como tropa de maniobra contra los compañeros ocupados.

Como señalamos en el comunicado común es necesario un gran debate a la altura de la situación: un Congreso Obrero de trabajadores ocupados y desocupados es un paso fundamental para interceder en la crisis política a favor de los intereses de los trabajadores.

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