Universidad de Salta: ¡Abajo las reformas reaccionarias del Concejo Directivo de Salud!

El concejo directivo de la Facultad de Salud ha votado una serie de reformas antiestudiantiles: si no se presentan en un llamado de examen, no puede presentarse al siguiente, perdiendo así un turno; si desaprueba 5 veces un final, se perdería la regularidad de la materia; y se elimina las prorroga de regularidades. Todas conquistas estudiantiles. Como respuesta, cientos de estudiantes se movilizaron el pasado lunes a afuera de las Universidad Nacional de Salta. todavía las autoridades no quieren dar brazo a torcer y sostienen dichas reformas.

Estas reformas del reglamento se desarrollan en el marco de la apertura de la carrera de Medicina y la vuelta a la presencialidad completa para el 2022. El año pasado numerosos estudiantes reclamaron las irregularidades de los exámenes de ingresos a la Carrera de Medicina que dependía en ese momento de la UNT. Para el 2022 la carrera va a depender completamente de la UNSa y se “eliminaría” el examen de ingreso de forma. Solo de forma, porque se lo reeemplazaría por el cursado y la aprobación de la materia “Introduccion a la Medicina” de modalidad bimestral, siendo excluyente para cursar la carrera. Es decir, en los hechos no se eliminó ningún examen. A este filtro decidieron sumar estos otros, pero ahora al conjunto de las carreras de las Facultad. Estos “coladores”, afectan directamente al sector de estudiantes que trabajan, que en el marco de la pandemia y de la crisis social y económica, aumentaron en su cantidad. Lo que no aumentó fueron las becas, sus montos, las comisiones, los docentes y el presupuesto universitario en general.

Este intento de disminuir la matricula responde directamente a que el presupuesto es cada vez menor, y en futuro la situación es más crítica, ya que está presionado por una presencialidad que no puede ser garantizada por los limites materiales que existen y por el recorte presupuestario. El presupuesto nacional para el 2022, tutelado por el FMI, estima un recorte del 6% en el sector educativo. Lo cual para UNSa es atroz, porque ya gestionábamos con miseria, donde las sedes del interior están al borde del cierre porque no hay recursos y las de capital se mantiene en función de la sobreexplotación docente y de forma precaria. Además este recorte está condicionado a que el Gobierno pueda aprobarlo, la crisis del régimen plantea que hay una posibilidad que se tenga que gestionar con una extensión de este presupuesto en curso, que está enmarcado en la semivirtualidad (donde no se puso un peso) y golpeado directamente por la inflación. Además la presión del FMI por una devaluación del peso ante el dólar también entraría en juego, porque el presupuesto de miseria valdría directamente mucho menos. Y si nos metemos en la cuestión del salario docente, es mucho peor, porque no se podría ni siquiera garantizar el aumento de miseria de las ultimas paritarias y condicionaría las paritarias entrantes.

Vamos a un cuadro de agudización de la crisis, donde el impass del gobierno solo deja asentado que para la educación ni siquiera dos pesos va a aumentar, y las autoridades se juegan a sostenerlo y adaptarse a las migajas. Veamos cuánto dura esta “coalición” en medio de semejante recorte presupuestario. Desde ya la lucha porque las reformas caigan tiene que sumarse la caída del “filtro de Medicina” su sola existencia amenaza la posibilidad de la extensión de dicho método a todas las carreras. Por ende, la necesidad de que los estudiantes de todas las Facultades se sumen es esencial y todos los Centros de Estudiantes deberían comenzar a pronunciarse contra las mismas. Aun logrando que los filtros caigan, tenemos que luchar porque se garantice el cursado y combatir la deserción estudiantil, fuertemente potenciada por la crisis humanitaria. Tenemos que darle otra orientación social a la educación y unir la lucha con la docencia, ultra precarizada.

¡Abajo las reformas reaccionarias! ¡Que caiga el filtro de Medicina! ¡Por el aumento del Presupuesto Universitario! ¡Abajo el pacto con el FMI!