Salta: una nueva medida antipedagógica del gobierno contra los docentes y la comunidad educativa

Con hacinamiento, aulas en derrumbe, cierre de escuelas con jornadas extendidas por falta de presupuesto, salarios de pobreza y con hambre, la extensión horaria propuesta por el Ministro de Educación de la Nación, Jaime Perczyk, para tratar en el Consejo Federal de Educación (CFE), es un ataque a la docencia.

En nuestra provincia, la semana pasada, Sáenz intentó imponer feriados laborales en la misma perspectiva para “mejorar la calidad educativa”. “En un comunicado oficial, la cartera educativa comunicó que, para cumplir la meta propuesta por el Consejo Federal de Educación, la Provincia adecuó el Calendario Escolar agregando días de clases y la celebración de los actos de manera presencial que alcanza el 2 de abril, 25 de mayo y 17 de junio" (Nuevo Diario, 25/3). En menos de lo que canta un gallo, el gobierno tuvo que recular, porque por debajo se produjo un gran rechazo hasta el punto de que los directivos tomaron posición en contra. Este repudio obligó a las burocracias de ADP a ensayar un paro que horas más tarde levantaron. Esta medida podía conjugarse, a la vez, con el llamado a paro de ordenanzas el 25 de marzo por su pase a planta y nombramientos de todas las precarizadas. Las burocracias de UPCN y ATE finalmente bajaron el paro, con el acuerdo del gobierno para ir a una conciliación obligatoria de la cual, por ahora, se desconocen los términos de la negociación.

La misma semana, en el norte de la provincia dos escuelas fueron tomadas por las familias denunciando la falta de comida para los niños (son $50-insuficientes- por alumno la partida que se destina para las escuelas que tienen comedores), infraestructura, hacinamiento, etcétera, y docentes de la comunidad Wichi de Misión Salin II marcharon por la Ruta Nacional 34, hacia la Casa de Gobierno de la Capital exigiendo la designación de cargos para maestras bilingües de la comunidad originaria.

A un mes del inicio de clases y con este contexto catastrófico, el gobierno de Sáenz no quiso jugarse a una pulseada contra la docencia autoconvocada de la provincia. Cada semana que pasa se expresan con mayor crudeza las enormes necesidades del conjunto de docentes, estudiantes y padres, empezando por la defensa del salario que con el último “aumento” del 45% anual, con la proyección que se estima del 80% anual, no habrá bolsillo que aguante.

Estas luchas que cada vez son crecientes ponen de manifiesto un choque evidente contra el Estado responsable de esta pobreza, la coalición oficialista nacional y provincial no puede dar salida sin entrar en una nueva crisis. Todos saben que el nivel de atención de un niño tiene un límite temporal y el problema no pasa por extender una hora más la jornada, pasa por un lado contrapuesto: la reducción de alumnos en el aula, nombramientos, titularizaciones anuales, docentes bien pagados con un salario mínimo y por cargo igual a la canasta familiar, condiciones de bioseguridad, presupuesto para alimento y una adecuada situación edilicia. Es decir que desde la docencia marquemos nuestra propia agenda y nuestro programa, partiendo de rechazar esta reforma anti educativa y abriendo el debate en todas las escuelas, con asambleas y reuniones, sobre la necesidad de un congreso de delegados docentes de base y una lucha común contra esta avanzada, para superar el impasse en que nos colocan las burocracias de nuestros sindicatos.

En Salta esta lucha y denuncia debe reforzar la lucha de la docencia autoconvocada por la recuperación de ADP con nuestra “Lista 6 Unidad Multicolor”, en las próximas elecciones el 24 de abril. Sólo la docencia tomando en sus propias manos los problemas puede dar una salida superadora.