Docentes universitarios: 27 de marzo al 1 de abril, paro nacional

Escriben Patricia Lambruschini y Diego Toscano

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El plenario de secretarías generales de Conadu Histórica realizado el jueves 16 resolvió continuar el plan de lucha de la docencia universitaria y preuniversitaria con una campaña de difusión y visibilización de los reclamos en la semana del 20 de marzo, y una semana posterior de paro entre el 27 de marzo y el 1 de abril. Se planteó, asimismo, avanzar en la coordinación con las asociaciones de base de otras federaciones (sobre todo de Conadu) que rechazaron la propuesta salarial del gobierno. Las medidas votadas en el plenario vienen precedidas por una semana de paro desde el 13 de marzo pasado, que afectó principalmente a las escuelas preuniversitarias, ya que en el grueso de las facultades todavía no habían comenzado las clases.

Las reivindicaciones planteadas apuntan a la reapertura de la paritaria, teniendo en cuenta el acuerdo ruinoso firmado por el gobierno y la burocracia sindical, en consonancia con la pauta massista: un 30% en tres cuotas no acumulativas (que se calculan sobre una base ya deprimida) y un aumento en la garantía salarial que reproduce la miseria del salario inicial y profundiza el aplastamiento del nomenclador. Con una inflación proyectada que superará el 20% en el primer trimestre y el 100% anual, se trata de un RECORTE SALARIAL liso y llano, que se suma a varios años de paritarias a la baja. También se reclaman otras cuestiones desoídas en la negociación paritaria: la eliminación del impuesto al salario, la recomposición del básico y que los aumentos se computen enteramente sobre éste, el refuerzo presupuestario a las obras sociales, las partidas para los ad honorem, entre otras.

Los docentes de Política Obrera intervinimos en numerosas asambleas de base de la federación planteando una crítica de la política de paros aislados y desgastantes del año pasado y la necesidad de que desarrollar todas las energías de la lucha por medio de la huelga general universitaria, que además busque articular con otros sectores de la educación: no-docentes y estudiantes universitarios, pero también con los trabajadores y estudiantes de escuela media e inicial. La necesidad de coordinar en general fue recogida, no así la perspectiva del paro por tiempo indefinido, que fue llevada como mandato al plenario de ConaduH por la asamblea de la ADIUNT.

A la par de la docencia universitaria, docentes provinciales de San Juan y La Rioja están desarrollando huelgas autoconvocadas. El miedo a que la huelga de la docencia universitaria abra un canal de lucha más amplio contra las paritarias Massa ha generado numerosas presiones contra ésta de parte de la burocracia sindical y los rectores. Las medidas resueltas en el plenario dan cuenta de la que la lucha no se ha cerrado. Esto refleja y es el resultado del enorme malestar que recorre a los docentes universitarios y preuniversitarios de todo el país, cuyos reclamos han sido entregados sin vergüenza por las otras federaciones. Un sector importante de esa docencia todavía no se ha sumado a la lucha, pero se encuentra expectante y con una creciente predisposición a hacerlo en medio de la crisis nacional e internacional que azota las condiciones de vida de los trabajadores. Las medidas previstas para las próximas semanas deben servir para profundizar la organización y canalizar esas energías hacia la lucha.

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