Tucumán: continúa el paro de la Salud impulsado por las asambleas de base

La lucha de la salud canalizada a través del SITAS (integrante del FESPROSA), que ya lleva ocho meses, ha sido ratificada nuevamente en un plenario de delegados.

En el curso de estos ocho meses, se han adoptado distintas acciones, desde el paro de consultorio e informático, hasta los paros sin asistencia y distintas acciones de movilización (asambleas en las calles, abrazos a los hospitales, marchas de antorchas y movilizaciones, cortes de rutas y puentes, ollas populares, entre otras).

La fuerza motriz de este proceso de lucha ha sido dada por las asambleas de base y un bloque de delegados combativos. Sin embargo, el proceso de lucha ha chocado sistemáticamente con la política de la conducción del SITAS, que ha sostenido repetidamente que para lograr los reclamos es necesario “el diálogo con el gobierno” y, subsidiariamente, las acciones de fuerza. En esta oportunidad, para asegurarse que la votación impusiera una tregua, convocaron a una reunión de delegados, con 48 horas de antelación, donde se debía llevar mandato a favor o en contra de darle una tregua al gobierno. Sin embargo, el plenario de delegados abortó este intento.

El sector conciliador de la directiva sigue la misma política que proponen los otros cinco sindicatos que agrupan a los trabajadores de la salud, o sea “el diálogo” y la conciliación con el gobierno. Su resultado es la nada misma desde el punto de vista de los reclamos de los trabajadores.

El sector de la conducción dialoguista ha venido agitando que si Jaldo cumple su promesa de campaña de que la Legislatura trate un proyecto de reforma de la ley de carrera sanitaria, se iba a levantar el paro. Este proyecto propone modificar unos coeficientes en la base de cálculo salarial que implicaría, de cumplirse aumentos salariales importantes, pero no hay señales desde la Legislatura.

El plenario de delegados también abortó distintas maniobras del gobierno dirigidos a dividir y crear un ambiente que le permitiera a la dirigencia impulsar el planteo de levantar. En este sentido, en vísperas de las elecciones provinciales, el gobierno adelantó el pago de junio, el aguinaldo, y otorgó un bono de 20 mil pesos por única vez. A su vez decidió otorgar un bono a los médicos, en especial a los psiquiatras, que accedieran a realizar una guardia los sábados, que afectó los paros de consultorios. Luego de las elecciones provinciales, el gobierno volvió a la carga ofreciendo un aumento en dos cuotas que en total suman un aumento sobre los salarios de febrero del 10% (6% en junio, 4% en julio).

Nada de esto modificó la voluntad de lucha de los trabajadores de la salud. Por otro lado, la rebelión popular en Jujuy ha sido un revulsivo que ha radicalizado los ánimos, colocando contra las cuerdas a la directiva. La conducción del SITAS viajó a Jujuy y destacó el carácter masivo del proceso de lucha, pero a la hora de orientar la lucha por el mismo camino, tomó otro rumbo. Así el 22 de junio acató el llamado al paro nacional convocado por el FESPROSA, pero se negó a coordinar una convocatoria unitaria con la docencia provincial y universitaria, incluso se negó a que la jornada tuviera un carácter activo, esto a pesar que el 3 de mayo se había producido una acción huelguística y movilización coordinada con los autoconvocados docentes, con la Adiunt y Sadop que reunión a varios miles de manifestantes.

Posteriormente, un sector de la directiva se sumó a la campaña mediática de ataque al pueblo jujeño que había sido brutalmente reprimido por el gobierno de Morales, diciendo que los “hechos de violencia” habían sido generados por un sector del kirchnerismo y de la izquierda, acusando a los delegados en el SITAS pertenecientes a Política Obrera de querer “usar” políticamente los reclamos genuinos de los trabajadores jujeños. Sin embargo, el plenario de delegados voto por amplia mayoría la continuidad del paro.

Está planteado ampliar la coordinación con hospitales y Caps del interior, para imponer la realización de un plenario provincial interhospitalario para discutir y resolver la huelga general de la salud, la elección de un comité de huelga y la coordinación de la lucha con todos los sectores que se orientan por el mismo camino para arrancar los reclamos.

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