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En el transcurso de la semana, a instancia de la directiva del SUTNA, se realizaron asambleas en la fábrica Pirelli en la cual se votó, en forma unánime, promover un reclamo de equiparación salarial con las otras plantas de la industria del neumático. Bajo la consigna "igual remuneración por igual tarea" los obreros de Pirelli ponen en evidencia la discriminación salarial de la que son víctimas los trabajadores: perciben 30% menos de salario que un trabajador de Fate o Bridgestone por la misma tarea y la misma antigüedad y categoría.
Esta fragmentación salarial es el resultado del CCT 101/75, cuyos “anexos” establecen cláusulas flexibilizadoras que diferenciaban las condiciones de trabajo y salariales entre fábrica y fábrica. La burocracia de la CGT y la CTA de Yasky-Wasiejko legalizó los "anexos" en el CCT 486/2007, firmado en 2007. Han pasado 16 años desde entonces.
En los debates y consideraciones que emergieron en las asambleas no se abordó un punto central: la inexistencia de un convenio colectivo único con salarios y condiciones de trabajo iguales en toda la industria del neumático.
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