La implosión del balotaje y el voto en blanco

Escribe Jorge Altamira

La patronal argentina trenzada en una guerra política.

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El pacto de Macri con Milei ha dejado expuesto al hueso la división enorme de la burguesía.

Este quiebre es el eje de la disputa electoral. Ha partido a la Unión Cívica Radical y al Pro. En el campo del peronismo ha forzado a los K a someterse a la conducción de Massa. JxC ya avizora una ruptura de sus bancadas en el Congreso, incluido el sector que levanta la consigna de “libertad de voto” como último recurso para evitar un desmembramiento. Lo mismo ocurrirá, a su debido tiempo, en el peronismo. La Fundación Mediterránea, una entidad central de la gran patronal nacional, acaba de aprobar el texto de un programa económico que plantea “la eliminación gradual del cepo” (Clarín, 27/10). Es exactamente lo contrario de lo que plantea Macri, para quien su gobierno fracasó debido a una oposición ‘gradualista’ al interior de Cambiemos. El mismo diario señala que Macri y Milei coincidieron en “en encarar el tema Leliqs” – la fabulosa deuda del Banco Central con el sistema bancario. El propósito es anular esa deuda, para poder avanzar en una dolarización. Es, de nuevo, lo contrario de lo que plantean las asociaciones de bancos que, en coincidencia con el equipo económico de Massa, se proponen un desarme gradual de la deuda, mediante un programa de reactivación industrial basada en el crédito bancario. “El sector de los bancos con negocios en Argentina”, reafirma Clarín, “rechaza la dolarización y se enfrentó a Milei previo en la primera vuelta”.

El pacto Milei-Macri devolvió a la escena a un conjunto de moribundos: ’Toto’ Caputo, Federico Sturzenegger y Guido Sandleris. Este trío y algunos más organizaron la corrida cambiaria de 2018 y aceleraron el mega acuerdo con el FMI. Daniel Funes de Rioja, en cambio, presidente de la UIA, tiene, otras preocupaciones: quién será el eventual ministro de Economía de Massa. La bancarrota de Argentina plantea a la burguesía la cuestión de un cambio de régimen económico y político, que ha desatado una suerte de guerra civil entre las fracciones aperturistas y proteccionistas, que se duplica con la pelea entre los fondos internacionales, de un lado, que pretenden ingresar al capital accionario de la patronal nacional a cambio de la cesión de la deuda externa, y el capital local, que busca una intervención menos invasiva del capital financiero. Es la disputa, agravada, de los últimos cien años de la historia económica del país.

El discurso electoral está condicionado por esta línea de demarcación. Cuando Massa denuncia que con Milei se acaba la obra pública, se refiere a la financiada en forma directa por el Estado, como el gasoducto K y la reversión de los del Norte. Pero la obra pública es lo más apetecido por los fondos internacionales que apoyan a Macri-Milei, mediante inversión y financiamiento extranjero, con garantías estatales. En torno a esto giran los acuerdos de libre comercio e incluso la propia dolarización. Los macri-libertarios denuncian que, de otro modo, no habrá reducción del gasto fiscal, del déficit fiscal y de impuestos. No dicen, claro, que representa una política de endeudamiento extranjero caro, que ha fracasado por eso en los principales países del mundo, en especial en su cuna, Gran Bretaña, donde quebraron dos enormes constructoras inmobiliarias, dejando a decenas de miles de trabajadores en la calle y escuelas, hospitales y viviendas destruidas. Para su objetivo, los socios capitalistas de Massa esperan obtener los recursos de China, que representan otra forma de deuda extranjera.

En la primera vuelta, UxP recogió una parte de los votos que emigraron de JxC y lo ayudaron a salir primero. Macri entiende que la reserva de votos que dejó JxC irán a parar ahora a Milei – por eso ha lanzado una Oferta de Adquisición Pública de LLA, sin poner un peso. La primera encuesta posterior a las PASO lo da ganando el balotaje por céntimos de porcentaje de votos. Si la apuesta falla, el macrismo sufrirá la pérdida política de la irrelevancia, pues no tiene adecuado apoyo en el Congreso. La UCR y una parte significativa del Pro se ha declarado en oposición a Milei, en una apuesta vergonzante por Massa. Si pierde, el bloque del ‘voto libre’ se quebrará irremediablemente. Los realineamientos de fuerzas serán determinados por la evolución de la crisis económica y política.

La “libertad de voto” es una declaración de crisis del sistema de balotaje, cuya función es asegurar una mayoría absoluta al candidato ganador. Erige una autoridad por encima del Parlamento, con facultades especiales como los decretos de necesidad y urgencia y la capacidad para modificar la ejecución del Presupuesto. Pero el balotaje es el producto del "pacto de Olivos”, para poder reducir el mandato presidencial a cuatro años, aunque con derecho (pero no certeza) de reelección. La posición de la mayoría radical y de una parte del Pro podría, por caso, aumentar la incidencia del voto en blanco y la abstención, lo que pondría en crisis al balotaje en el plano práctico político. Todavía es prematuro ofrecer un pronóstico sobre esto, pero cambia el peso del voto en blanco, más que la abstención en la segunda vuelta. Podría aumentar la participación electoral debido al impacto de la crisis política en la población, pero también el voto en blanco, como una posición de crítica y de repudio al conjunto del sistema político.

Para la posición votoblanquista de nuestro partido, Política Obrera, esta evolución de la crisis tiene la siguiente importancia: salir a clarificar el carácter que debe tener ese voto en blanco, en cuanto no debe limitarse a una posición, digamos de fastidio, sino de oposición social y política. Es que la crisis económica y esta crisis política se habrán de acentuar.

La táctica electoral del voto en blanco debe ser la ocasión para una crítica al capitalismo, en franca decadencia e implosión, y para impulsar un reagrupamiento político del activo de la clase obrera – sin distinción de géneros, edades ni nacionalidades.

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Jorge Altamira - LU6 Radio Atlántica (25-10-23) Entrevista al dirigente nacional de PO, publicada en el canal de YouTube de Política Obrera, 26/10/2023.

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