ACUMAR: frente a las intimaciones y despidos, preparemos el plan de lucha

Escribe Isabel Iturbe

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En el marco del ataque a los trabajadores que forma parte de los objetivos trazados por el gobierno de Milei (la implementación de un ajuste sobre el gasto a través la reducción y eliminación de entes públicos y organismos), se esperan 120 despidos en ACUMAR -Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo-. La gestión a cargo de Lucas Figueras (PRO) pretende avanzar en el organismo con un plan de ajuste. El método es distinto que en otros organismos: se intimó a los trabajadores a responder por supuestos incumplimientos de sus deberes, ausencias injustificadas e incumplimiento de la jornada laboral. Para esto, se apoyaron en la desprolijidad de la gestión anterior que no consignó en el sistema de registro de asistencia, como correspondía, el trabajo en territorio, licencias y vacaciones. Habiendo pasado la fecha límite para presentar los 120 descargos, saldrían telegramas de despidos. Además, esta semana llegaron intimaciones sobre los trabajadores “jubilables", un eslabón más de la cadena del ajuste.

En ACUMAR venimos procesando un debate en torno a la orientación de la política criminal del gobierno y la urgencia de organizarse de manera colectiva para enfrentarla. Tenemos por delante la pelea por los puestos de trabajo, el salario y los reclamos de los trabajadores de nuestro organismo, a sabiendas de que es necesario vincular las luchas, de manera conjunta, como único camino para doblar el brazo ajustador del gobierno. A partir de estas discusiones es que logramos las convocatorias a asamblea, a pesar de la indiferencia de ATE, que durante los meses transcurridos desde antes de la asunción del gobierno de Milei se negó categóricamente a convocarlas bajo el falaz pretexto de que “en ACUMAR no pasa nada”. Por su parte, UPCN, la otra pata del gremio en ACUMAR, no desarrolla ninguna política de organizar a los trabajadores más que refrendar paritarias a la baja y en todo caso tratar de negociar la suerte de sus propios afiliados, en detrimento de desenvolver una política hacia el conjunto de trabajadores. Finalmente, como resultado de la insistencia de la base de trabajadores arrancamos asambleas.

A la asamblea, la junta interna llevó el planteo de que, si bien no podía descartarse, no era el procedimiento a esperar el envío de telegramas, dado que debía mediar una respuesta vía notificación por lo que no se prevén respuestas inmediatas. En orden a la desconfianza hacia el procedimiento, la asamblea puso en discusión dos mociones: por un lado, el llamamiento al paro activo de 24 horas para el día lunes como medida contra las intimaciones truchas y contra los despidos. Otra moción fue la de convocar a paro activo condicionada por la recepción de telegramas de despidos, en ese caso la modalidad es la de garantizar el ingreso y realizar una permanencia en el organismo. En conclusión, la asamblea resolvió que en el caso de se notifiquen despidos se realizará un paro total con cese de actividades el día lunes 15/04 y concentrar en el hall de la sede central para garantizar el ingreso de las y los trabajadores y posteriormente realizar una asamblea para evaluar los pasos a seguir.

La asamblea también resolvió impugnar el procedimiento de intimaciones y defender a todos los compañeros intimados, al mismo tiempo que colaborar colectivamente con la reunión de informes que demuestran que las acusaciones son truchas e infundadas. El conjunto de imputaciones realizadas por la patronal son inconsistentes y configuran una vil maniobra dado que, entre otras cosas, descargan sobre el trabajador respuestas sobre un sistema de control de asistencia, de todo el año 2023, cuya facultad de registro estaba bajo la responsabilidad de la gestión de Sabatella (2019/2023). Sabemos que estas intimaciones conforman una primera etapa y que habría otra lista de futuras intimaciones sobre trabajadores. La patronal busca allanar el camino de los despidos mediante causales inventadas para poder así llevar a cabo el plan de ajuste en ACUMAR. En este sentido, entendemos que las 120 intimaciones constituyen un ataque al conjunto de los trabajadores del organismo.

Los trabajadores en ACUMAR, sabemos que es necesario poner en pie espacios de organización y coordinación de todos los trabajadores estatales para impulsar un plan de acción contundente para derrotar el ajuste del gobierno de Milei.

Abajo las intimaciones truchas. Ningún despido en ACUMAR. No a la intimación a los jubilables. Abajo los despidos y el ajuste contra los estatales. Por un plan de lucha de todos los estatales.

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