Paro de ATE: un fiasco premeditado
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Cuarenta y cinco minutos de acción contra los despidos y por las reincorporaciones organizó ATE el viernes 5 de abril. Un paro convocado boca a boca y sin preparación tuvo una respuesta mucho mayor que las anteriores y duró lo que un suspiro.
La medida había sido convocada al Ministerio de Economía a las 13 horas en el plenario de ATE Nacional del miércoles 3. El jueves 4, el plenario de ATE Capital refrendó la medida pero la adelantó una hora. Cada organismo convocó como pudo a lo que ya era una desarticulación premeditada.
En la cita estaban varios organismos pero los que no estuvieron iban informando que estaban llegando mientras desde el escenario se planteaba que había que desconcentrar. El operativo policial fue mayor y no permitía acceder al Ministerio lo que llevó a que los estatales se pararan sobre la Plaza de Mayo.
La desconcentración se dio al mismo tiempo que llegaban más trabajadores. En el escenario tomaron la palabra Rodolfo Aguiar y Daniel Catalano... Nada nuevo: no hay “plan de lucha” ni ninguna directiva orientada a llevar esta pelea por la reincoporación a la victoria.
Este paro podría haberse construido con recorridas, materiales y una buena convocatoria, pero la burocracia de ATE no tiene ninguna disposición a llevarlo adelante.
Tenemos que autoconvocarnos, organizar el plan de lucha y poner en pie los paros que construyan la medida necesaria para reincorporar a los miles de despedidos: la ocupación de los ministerios y lugares de trabajo.
